Vuelta a la trinchera en busca de la permanencia. El Ángel Ximénez regresa a la competición oficial después del largo parón propiciado por la disputa del Campeonato de Europa de selecciones nacionales, en el que España se colgó la medalla de plata. Los pontanos retoman la Asobal con sed de triunfo y mucha necesidad, ya que tras la conclusión de la primera vuelta se encuentran anclados en la zona baja y, por vez primera desde el ascenso de hace tres temporadas, la estabilidad deportiva del club parece en entredicho.

Y lo hacen ante un Granollers (Alcalde Miguel Salas, 18:30) que pelea por otras cosas, concretamente por los puestos europeos ya que el cuadro catalán está instalado en la tercera posición y aspira a dar guerra al Naturhouse La Rioja en la lucha por el subcampeonato liguero. El rival, por tanto, no es el más propicio para la situación de necesidad que padece el Ximénez. Eso sí, el largo parón sirvió al equipo que entrena Javier Cabanas para templar los ánimos y rearmarse. El técnico también ha tenido tiempo de conocer mejor a sus jugadores y fijar conceptos, sobre todo en el aspecto defensivo.

Así, en el vestuario pontano se espera que el inicio de la segunda vuelta sirva para hacer borrón y cuenta nueva y dejar atrás la ansiedad que el equipo arrastró en sus últimas comparecencias en la Asobal. Además, los refuerzos comenzarán a notarse y se espera que tanto el montenegrino Novica Rudovic como el serbio Janga Vojvodic sumen sus primeros minutos de juego. Los que no estarán ya con el equipo son el argentino Sebastián Kramarz y el serbio Nicola Potic, las bajas confirmadas hasta la fecha. Cabanas sigue confiando en sumar un nuevo efectivo para la primera línea, pero mientras el club rastrea el mercado el equipo prefiere centrarse ya en la pura competición. De entrada, Mario Porras es baja para el duelo ante el Granollers y Curro Muñoz llega siendo seria duda, al margen del lesionado de larga duración, el sevillano Chispi.

A pesar de la entidad del rival, los precedentes señalan que la machada es posible. El Ximénez ya venció al Granollers en su estreno en la Asobal y el curso pasado tan sólo cayó por un gol de diferencia. Resultados que pondrán en alerta al cuadro catalán en el arranque de la parte definitiva de la competición. El equipo de Cabanas no quiere complicarse la vida en exceso y para ello necesita hacerse fuerte en casa sin importar la entidad del rival. Todo lo contrario provocaría el regreso de esa ansiedad que ahora se ha transformado en una creciente sed de victoria.