La tercera jornada de venta de entradas para los abonados -segunda a través de internet- tuvo un ritmo mucho menor que las dos primeras, ya que apenas se dispensaron en torno a un millar de localidades. Así, restando en cuenta las que queden liberadas por el club y las de los abonados que no hayan retirado su suplemento, a día de hoy sólo quedan unas 2.500 entradas en taquilla.

Lo que sí queda claro es que cuando el viernes se abra la venta libre los que quieran ver al Barcelona en la Copa tendrán que rascarse el bolsillo, ya que sólo quedan mil entradas con un coste inferior a los 100 euros. Como era de esperar, las localidades de anfiteatro, las más caras del estadio, son las que menos tirón están teniendo. A última hora de ayer quedaban en taquilla más de 1.500 por vender, en el único claro que por ahora queda en el estadio. En tribuna descubierta (a 90 euros) todavía quedaban en torno a 350 localidades, mientras que en preferencia seguía habiendo muchas vacantes en los dos sectores más esquinados (160 en el 9 de la grada alta y 340 en el 1 de la baja).

También hay huecos en el fondo sur, la grada con menor número de abonados, donde aún quedan unas 140 entradas. En el norte, virtualmente agotado, sólo restan un puñado de localidades en el sector de los Incondicionales.