Después de quedarse a un triunfo del ascenso a Segunda División B, el Ciudad de Lucena ya trabaja en su nuevo proyecto, en busca de dar continuidad al gran curso realizado por su equipo. Por eso, tras la renovación de los hermanos Carrasco, el club celeste empieza ya a confeccionar su plantilla y en ella no podía faltar un año más el capitán, Pablo Gallardo.

El central sevillano, de 34 años, es la primera renovación de cara a la campaña venidera, en un club que espera mantener buena parte del grupo que ha peleado por el ascenso hasta el último partido en las eliminatorias de ascenso.

El veterano zaguero, que llegó al conjunto aracelitano el curso pasado después de una aventura en el extranjero, se hizo con los galones de capitán en el vestuario y en el club valoran su capacidad de liderazgo, además de su fiabilidad defensiva y experiencia.

Gallardo, que fue incluso vital en la clasificación para la final del play off, con su gol ante el Xerez DFC, pone la primera piedra para afianzar al Ciudad de Lucena, que además de intentar sellar varias renovaciones ya mira al mercado, consciente de que se producirán algunas bajas en la plantilla, caso de Luismi, que ya se ha comprometido con el Córdoba CF, para integrarse en su filial, con miras a estar en la órbita del primer equipo.