Jorge Lorenzo (Ducati) volvió a golpear con su rendimiento en la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Cataluña de MotoGP.

Lorenzo avisó de sus intenciones de cara a la carrera al conseguir el mejor tiempo de la primera jornada, en la que Marc Márquez (Honda) sufrió para ser duodécimo y protagonizó una caída sin consecuencias casi al final del día.

Si por la mañana el más rápido fue Valentino Rossi (Yamaha), en la segunda y última tanda de la jornada en Montmeló fue Lorenzo quien se erigió en protagonista absoluto.

El piloto de Ducati demostró una vez más que la victoria conseguida en Mugello (Italia) no fue fruto de la casualidad y doblegó por algo más de una décima de segundo a Andrea Iannone (Suzuki), y con casi medio segundo a Maverick Viñales (Yamaha), que llegó a ser líder, y a su compañero de equipo, Andrea Dovizioso.

Además, se le vio cómodo con su Ducati, derrapando como en él es habitual y siempre por la línea.

Todos ellos, desde Lorenzo a Dovizioso, acabaron por debajo del registro matinal de Rossi, que rodó entonces en 1.39,456, pero que por la tarde no pudo bajar de 1.39,989, lo que lo relegó a la undécima plaza de esa sesión, y a la quinta en el cómputo global del día.