Balonmano | División de Honor Plata Femenina

El Itea Córdoba se impone a domicilio y el Deza CBM cae en Fátima

  • Las fuensantinas mantienen el liderato al doblegar al Parla en tierras madrileñas (15-22)

  • Las granates se ven superadas en su pista por un Sanse mejor en el segundo tiempo (25-34)

Ariadna Vázquez, del Deza Córdoba BM, es frenada por la defensa del Sanse.

Ariadna Vázquez, del Deza Córdoba BM, es frenada por la defensa del Sanse. / Miguel Ángel Salas

Resultados dispares para los dos conjuntos cordobeses en la División de Honor Plata Femenina de balonmano. El Itea Córdoba sumó dos puntos importantes para mantener el liderato en su visita al Parla (15-22), mientras que el Deza Córdoba BM cayó en su pista ante el Sanse, que se mostró superior en la segunda parte parte del encuentro (25-34).

En Parla, el Itea Córdoba se mostró concentrado desde el inicio y cogió el mando en el marcador mediada la primera parte. Las fuensantinas, con Lucía Vacas y Aina Fernández muy acertadas en ataque, se fueron al descanso ganando cómodamente con dos goles de renta (9-11).

Con todo, les quedaba faena para la segunda parte y el conjunto madrileño apretó las tuercas de inicio intentando igualar la contienda. Aguantaron su renta en el marcador las chicas entrenadas por Rafa Moreno, que poco a poco pudieron abrir más su brecha al frente del partido. A falta de diez minutos, el marcador reflejaba un 14-17 que mantenía la tensión por ambos bandos, pero ahí el Itea Córdoba rompió el duelo y sentenció con el 15-22 final. Aina Fernández, con siete goles, fue la mejor del equipo de La Fuensanta en ataque.

El Deza Córdoba BM, por su parte, tiró por la borda sus opciones de puntuar en una mala segunda parte. Las granates, lideradas por una imparable Ariadna Vázquez, hicieron una primera parte muy completa y lograron una renta esperanzadora al descanso (21-17), que hacía presagiar un final feliz.

Sin embargo, la tónica del partido cambió radicalmente en el segundo tiempo, con un Sanse más firme en defensa y acertado en ataque. Las de Mario Ortiz sufrieron un atasco descomunal en ataque, que las llevó a hacer solo un gol en 20 minutos. Una circunstancia que el equipo madrileño no desaprovechó para voltear el marcador de manera escandalosa, poniendo ese extraño 25-34 al término del tiempo reglamentario.

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