Ismael Falcón jugará el domingo su cuarto partido liguero con el Córdoba -también actuó en la corta aventura copera con el Lugo-, tras haber cosechado todos los resultados posibles en los tres anteriores. Y lo hará en Santo Domingo, la que fue su casa la pasada temporada y ante un Alcorcón ante el que se estrenó como blanquiverde encajando tres goles y cosechando una derrota en el ya lejano mes de septiembre. Ahora, el meta gaditano espera dejar por primera vez la portería a cero para "ayudar al equipo" a salir de la mala racha de resultados en la que se encuentra. El reto le llega ante un rival en plena sequía, que lleva un punto de nueve y acumula 328 minutos sin marcar, si bien como local se muestra otra vez fortísimo.

"El destino parece que está marcado con el Alcorcón. Es otra oportunidad que se me presenta y es contra mi ex equipo, lo que supone una doble motivación", señaló Falcón en rueda de prensa, donde catalogó de "casualidades" su nueva participación ante el conjunto alfarero. Eso sí, confía en que "se dé otro resultado que no sea el de casa y el equipo consiga la victoria, que es lo más importante". En la primera vuelta, los madrileños se llevaron los puntos de El Arcángel (1-3), una derrota que entonces supuso un punto de inflexión a partir de la visita a La Romareda que ahora el Córdoba está obligado a repetir otra vez a domicilio.

Tras aquella participación, Falcón actuó de nuevo en Liga en el Anxo Carro de Lugo (1-2) y ante el Huesca (1-1), por lo que ha encajado cinco goles en sus tres encuentros, todos forzados por las convocatorias de Razak con Ghana. Ahora, la sanción del meta africano, expulsado por roja directa ante el Leganés, le devolverá a la titularidad dos meses y medio después, algo que está seguro de que no influirá en su rendimiento porque "al no estar jugando tienes que entrenar con la máxima intensidad para estar preparado; me encuentro bien físicamente, con ánimo y ganas de que salgan bien las cosas. Creo que estoy preparado para estar en el equipo el domingo y que salga bien". "Es una semana más, pues intento que todas sean de llegar a la competición bien y luego está el míster que es el que decide, pero mi cabeza siempre es prepararme para jugar", continuó el cancerbero.

Con su experiencia de la temporada pasada, en la que defendió hasta en 20 partidos la portería alfarera, Falcón advierte que Santo Domingo "es un campo que por dimensiones y todo parece que es muy rápido y hay mucha segunda jugada", algo que normalmente beneficia a un Alcorcón que se caracteriza porque "es un rival de apretar, desde que empieza hasta que el árbitro pita el final, con mucha intensidad y no baja el ritmo". De esta manera, el gaditano pide que "desde el calentamiento ya hay que estar metido porque hay que salir desde el inicio hasta el final sin bajar los brazos y con una intensidad bastante alta, pues a todo el que llega allí parece que le cuesta entrar en el partido y cuando te das cuenta vas perdiendo".

De momento, el Huesca es el único que ha conseguido vencer en el feudo del quinto mejor local de la categoría de plata hasta la fecha -22 puntos de 33 posibles-, si bien el Numancia, el Almería, el Lugo y el Valladolid el pasado fin de semana también salieron vivos de un campo que sólo ha visto celebrar cuatro tantos a los visitantes. Dato que, unido la serie de tres jornadas sin ganar y la sequía de 328 minutos que suman los amarillos, convierte el partido en una batalla de mínimos que luego habrá que refrendar sobre el verde.

Y ahí, Falcón no quiere confianzas ante un enemigo que "este año ha mejorado, tiene jugadores que juegan a fútbol, aunque pierden a un jugador como Campaña que es importante para ese fútbol, si bien tienen bastantes relevos. Tienen jugadores con experiencia, determinantes y sobre todo que han aportado este año algo más de calidad". Más complicaciones, sin duda, para que el Córdoba levante el vuelo en un escenario que, además, tradicionalmente no se le ha dado demasiado bien.