El Cajasur Córdoba BM afronta este sábado el último partido en su feudo de la primera fase de la División de Honor Plata. Los granates reciben al Ikasa Madrid (Fátima, 19:00) en un choque con poco en juego, pues los puntos en liza no se arrastrarán a la segunda fase para ninguno de los dos equipos, pues pelearán por objetivos opuestos. Pese a ello, el ánimo del conjunto cordobés es el de sumar una nueva victoria en su pista y dar continuidad a las buenas sensaciones.

Y es que la agónica victoria en Zamora dejó en una posición de privilegio a los de Jesús Escribano, que ya tienen asegurada su plaza entre los cinco primeros, lo que hará que en la segunda fase puedan luchar por la plaza en la Liga Asobal. En todo caso, la clasificación final de esta primera fase influirá en el orden del calendario de la segunda, algo menor pero que invita a ganar los dos partidos finales para buscar un arranque más suave en el segundo tramo de la competición.

Ante el Ikasa Madrid, Escribano aprovechará para dar descanso a los jugadores que arrastran algún problema físico y para dar mayor protagonismo a hombres que quizás han jugado menos en lo que va de temporada, pero que serán igualmente importantes cuando llegue la pugna por el ascenso.

El conjunto madrileño es penúltimo y, aunque cuenta con un equipo talentoso, está pagando su falta de experiencia en la categoría. Hasta la fecha solo ha podido sumar dos victorias y dos empates, por lo que necesitará mejorar mucho sus prestaciones cuando lleguen sus duelos directos para amarrar la permanencia.

Mientras llega esa parte decisiva de la temporada, el Cajasur Córdoba BM quiere mantener la sana costumbre de ganar partidos.