Dos visitas ligueras y dos empates; una visita copera y una derrota. Ese es el desalentador balance del CCF en sus apariciones por el Anxo Carro de Lugo, donde volverá mañana con ganas de romper ese maleficio ante una de las revelaciones de la temporada.

El primer encuentro entre blanquiverdes y gallegos llegó en abril de 1987, en una Segunda División B que aquella temporada estuvo formada por un único grupo. El CCF arribó a tierras lucenses con su segundo entrenador de la temporada, que no sería el último. Ya que Vavá, que había sustituido a Pepe Escalante, fue destituido la siguiente jornada al caer en casa ante el Salamanca. Juanín, el mejor futbolista de la historia de la entidad, fue su relevo. Todo después de haber sacado una igualada sin goles en un escenario que hasta entonces era desconocido.

Más de un cuarto de siglo después, el Córdoba volvió a Lugo el curso pasado, coincidiendo con el regreso albirrojo al fútbol profesional tras dos décadas en el pozo. Fue en la jornada 3 y los lucenses mostraron su apuesta por el juego combinativo que hoy mantienen para poner en serios aprietos al conjunto de Rafa Berges. Al final, un tanto de Javi Patiño salvó los muebles al dejar en nada el gol del exblanquiverde Quiroga en la primera parte.

Este equilibrado balance en Liga sólo se vio rota en la única vez que ambos equipos cruzaron sus caminos en Copa. Fue en el torneo 92-93 y los locales se impusieron (2-1) a la escuadra que entonces dirigía Tolo Plaza gracias a los goles de Carolo y Modesto; Vera hizo la diana de un CCF con ganas de sacarse esa espina.