Adrián Menéndez no podrá repetir título en su torneo talismán. El tenista malagueño, último representante español que quedaba en el cuadro final, cedió ante el turco Altug Celikbilek por 6-3 y 6-0 en cuartos del Open Ciudad de Pozoblanco Covap, torneo ATP Challenger con 52.000 euros en premios, en un partido que estuvo muy competido en el primer set, pero que a partir del séptimo juego se decantó claramente para el tenista turco.

Menéndez quería repetir la proeza lograda en 2007, cuando, contra pronóstico y sin ser cabeza de serie, se alzó con el primer gran título de su carrera deportiva en estas pistas del Polideportivo Municipal. Como entonces, ahora tampoco partía entre los favoritos y ya se había encargado de eliminar a uno de los cabezas de serie en octavos de final, pero el obstáculo de Celikbilek resultó demasiado alto, en parte, por culpa de sus propios errores.

El partido tuvo dos partes diferenciadas, una primera en la que la igualdad era manifiesta y en la que Menéndez, en parte por los bajos porcentaje de servicio de su rival, tuvo sus opciones; y otra a partir del 4-3, cuando tras salvar una bola de break, el español acabó cediendo su juego y, con él, el set.

La segunda manga no tuvo historia. El tenista malagueño, muy errático, se estrellaba una y otra vez contra la red mientras veía cómo su rival se bastaba con mantener la intensidad y los peloteos desde el fondo para llevarse los puntos finales de cada juego. El 6-0 fue excesivo para lo que se vio sobre la pista, pero la victoria de Celikbilek era merecida.

Su rival en la semifinal será el segundo favorito, el francés Gregoire Barrere, que se había deshecho minutos antes del boliviano Federico Zeballos. El tenista suramericano, que ha cuajado uno de los mejores torneos de su carrera deportiva, plantó cara ante el tenista francés, que sigue su paso inmaculado por el torneo. Zeballos era capaz de responder a un temprano break de Barrere en la primera manga, que acabaría cediendo por 6-4. La segunda comenzó igualada, pero el ex Top-100 galo logró imponer su jerarquía en este tipo de partidos para alcanzar la penúltima ronda.

Cem Ilkel, ante la revelación Geerts

El turco Cem Ilkel y el belga Michael Geerts disputarán la otra semifinal del Open Ciudad de Pozoblanco después de que superaran en cuartos de final al neerlandés Tim van Rijthoven y al norteamericano Emilio Nava en dos encuentros muy igualados.

El primero de los duelos enfrentaba a las dos revelaciones del torneo, Geerts y Nava, dos tenistas que venían creciendo desde la fase previa, que habían eliminado a favoritos y se habían metido en cuartos de final gracias a la regularidad de su juego.

Especial atención había hacia un Emilio Nava que se aventura como una de las promesas de futuro tras su brillante etapa júnior y al que los puntos alcanzados en Pozoblanco le harán auparse en el ránking mundial. Pero enfrente estaba un Geerts que había dado la gran sorpresa en octavos al eliminar al gran favorito del torneo: Benjamin Bonzi.

La igualdad que se preveía quedó manifiesta en pista, donde el triunfo de Geerts llegó tras sendos tie breaks. Pese a ello, los primeros compases del encuentro fueron de dominio de un Nava que solventaba su servicio con contundencia y le complicaba la vida a su rival al resto. Geerts, que se había amparado en el saque para ganar sus cuatro partidos en el torneo, sufría. Poco a poco se fue equilibrando la balanza y ambos contendientes emprendieron una lucha desde el fondo que no auguraba un claro ganador.

Nava tuvo cerca el set ball con 5-4 y 30-30, pero fue Geerts el que, en el tie break, se mostró mucho más seguro. Su rival cometió un error no forzado de salida y el belga nunca perdió esa ventaja, ampliándola para ganar por 7-3. Esa inercia ganadora pareció acompañarle en el segundo set, en el que logró el primer break del partido en su segunda oportunidad y muy pronto se puso con un 3-0 que parecía definitivo a tenor de lo que había ofrecido en anteriores encuentros.

Con Nava tocado, en lo moral y lo físico -fue atendido en pista en el primer set-, el partido parecía encaminarse a un final sin historia. Pero este norteamericano de origen mexicano no tiene por norma rendirse y, a la primera oportunidad que tuvo, en el séptimo juego, recuperó la desventaja y equilibró el partido. Como en el primer set, todo se encaminó a un final agónico. Geerts tuvo dos bolas de partido con 6-5, que Nava salvó con su saque, pero no pudo evitar la derrota en otro tie break que esta vez tampoco le sonrió. El 7-6(2) y 7-6(3) lo dice todo. Dos titanes que depararon un gran espectáculo.

Su rival en la semifinal será el único cabeza de serie que quedaba en la parte alta del cuadro: Cem Ilkel. El joven turco se enfrentaba a todo un cañonero, Van Rijthoven, que había hecho gala de su potencia con el servicio en sus dos primeros partidos, pero que esta vez se encontró con un rival que estuvo muy bien al resto y que supo imponer su mayor experiencia.

El turco, que ha ido de menos a más conforme pasaba el torneo, aguantó los envites del neerlandés y decidió en el momento clave. Con 6-5, logró dos restos ganadores, tomó ventaja con el saque del holandés y acabó decantando el set en el duodécimo juego.

Si en el primer set, Van Ritkhoven ya había tenido opciones al resto para haber presionado al cabeza de serie número cuatro, en este segundo set éstas se multiplicaron. Hasta cuatro bolas de break salvó Ilkel en los primeros juegos, sin tener apenas opciones al resto. Pero, como en el primer set, su presión subió en los momentos decisivos. Con 4-3 a favor, Ilkel ya contó con dos bolas de ruptura; con 5-4, un 0-30; llegó al 40-40 en 6-5... Rijthoven aguantó la presión. Pero en un tie break muy igualado, en el que cada uno mantuvo su saque, Ilkel rompió con 5-5 y aprovechó su primera bola de partido para ganar por 7-5 y 7-6(5).

Un español en la final de dobles

Habrá presencia española en la final de dobles. la pareja formada por el balear Sergio Martos y el ecuatoriano Diego Hidalgo se imponía por 7-6 (5), 5-7 y 10-7 en un encuentro igualado, parecido al que los africanos vivieron la jornada previa ante los andaluces Adrián Menéndez y Carlos Gómez Herrera, aunque esta vez se decantó en contra de sus intereses.

El encuentro fue igualado, con iniciativa para la pareja latina en el primer set, en el que ya tuvieron una bola para apuntarse la manga con 5-4 y que finalmente se llevaron en un tie break, también, muy igualado. La segunda fue similar, sin alternativas en el marcador y en el que la presión de Mansouri y Dougaz surtió efecto en el duodécimo juego.

Esta inercia positiva se vio en el arranque del super tie break, en el que los tunecinos se pusieron rápidamente 4-1 arriba. Sin embargo, Martos e Hidalgo le dieron la vuelta al marcador con un parcial de 8-1, que les concedía hasta cuatro bolas de partido. A la tercera, la pareja hispano-ecuatoriana certificó la final.

Ahí se enfrentarán a los neerlandeses Tim van Rijthoven e Igor Sijsling, que ya habían asegurado su pase por retirada de Khade y Gabashvili.