Alejandro Davidovich vuelve al circuito ATP después de una baja obligada tras la lesión que se produjo ante Matteo Berrettini en los octavos de final del US Open. Tras un torneo de alto nivel y forzar cinco sets al italiano, se lastimó en la última manga y no pudo competir en el final del partido. Ello le obligó a perderse la eliminatoria de Copa Davis en Valencia con España y también un par de torneos de ATP, en Metz (Francia) y Sofía (Bulgaria). 

Desde el puesto 29 que ocupa en la actualidad en el ranking mundial, Davidovich intenta cerrar el último cuarto de temporada con buenos resultados para terminar con buen sabor de boca. De fondo están las finales de la Copa Davis en Málaga, del 22 al 27 de noviembre, a menos de dos meses, en las que el malagueño tiene mucha ilusión por competir en casa y pelear por la Ensaladera.

El primer torneo tras la lesión para Davidovich será en el ATP 500 de Astana. Hasta Nur-Sultán (Kazajistán) viaja el de La Cala del Moral para participar en un torneo de mucho nivel, con cinco Top 10 (Medvedev, Alcaraz, Tsitsipas, Aliassime y Hurkacz) en la lista de participantes, además de Rublev, Sinner, Schwartzmann, Cilic, Bautista... El torneo se disputa en pista dura indoor y está dotado con más de dos millones de euros en premios.

Tras el torneo kazajo, Davidovich tiene previsto participar la semana siguiente en el nuevo ATP 250 de Gijón, también indoor, en el que partiría como sexto cabeza de serie, del 10 al 16 de octubre, en el ATP 250 de Nápoles (17 al 23), en el que sería el cuarto preclasificado, y en el ATP 500 de Basilea, también sobre la misma superficie, para cerrar el mes. Después iría el Masters 1000 de París-Bercy antes de la gran fiesta de la Copa Davis en el Carpena.