We can be heroes. Una celebración de la cultura LGTBQ+ | Crítica de libros

Rostros de lo humano y lo divino

  • Roberta Marrero publica un singular y hermoso libro que es, a la vez, enciclopedia del colectivo LGTBQ, novela autobiográfica, libro de arte, tratado sobre nuestra historia reciente y trabajo divulgativo sobre el 'bullying'

La artista, cantante y actriz Roberta Marrero (Las Palmas, 1972).

La artista, cantante y actriz Roberta Marrero (Las Palmas, 1972).

Hace un año, el Congreso de los Diputados aceptó la proposición de ley que pedía eliminar los requisitos médicos para que las personas trans pudieran cambiar legalmente de nombre y sexo, así como permitir a los menores de edad hacerlo, para que pudieran crecer con la certeza de que la vida merece la pena, de que la vida no es un matadero.

Hasta ese día, el siglo XXI avanzaba hacia el futuro con una base de brutalidad medieval que le negaba lo más básico del presente, el principio elemental y antiguo de que de todo ser humano debe recibir un trato humano. Aquel día el pleno aprobó una iniciativa que pretendía acabar con la concepción de la transexualidad como una enfermedad.

Hasta este pasado febrero, cuando dicha iniciativa se convirtió en la primera ley trans integral, las personas transexuales habían vivido en el desamparo jurídico, en la desprotección de los derechos humanos más esenciales, a pesar de ser el colectivo que más ha sufrido la marginación, la exclusión y el desprecio.

España es un país con una democracia avanzada, pero con algunos cuartos en obras, que a veces progresa a muy buen ritmo y parece casi completada, y otras da la sensación de que la casa se viene abajo. Con esta ley nuestra democracia es más completa y nuestra sociedad más humana, más inteligente y más justa, aunque muchos derechos sigan siendo vulnerados.

Casi coincidiendo con este noticia, la artista Roberta Marrero (Las Palmas, 1972) publica su segundo libro, We can be heroes. Una celebración de la cultura LGTBQ+, un exquisito volumen que va de lo personal a lo universal, y que recoge una muestra diversa y genial de actrices, músicos, pintores, poetas o performers con la que reivindica la contribución del colectivo a un mundo más habitable, sofisticado, culto, comprometido, plural y divertido, sin dejar de atender a las dificultades vitales del camino y a la crueldad sufrida.

"Si hay una letras en las siglas LGTBQ+ que permanece en un nivel de ostracismo social, marginación, pobreza, altos niveles de agresión, asesinato y suicidio (por poner lo primero que me viene a la cabeza, pero podría seguir unas cuantas líneas más), esa es la T de trans", escribe Marrero. 

David Bowie nos hizo entender que lo que la mayoría teme de la vida es justo lo que para algunos es la vida

El libro arranca con la historia personal de su autora en el contexto cultural y político que le tocó vivir, y su biografía acaba mutándose con el tiempo y los personajes que van componiendo este puzle que esconde el posible dibujo de la libertad con todas las grietas y cicatrices de cada pieza aquí expuesta.

Este trabajo puede entenderse como una enciclopedia del colectivo, como novela autobiográfica, como libro de arte, como tratado de nuestra historia reciente o como trabajo divulgativo contra el bullying, y en todas estas posibilidades sentimos el magnetismo de su autora, ya sea hablando de sus años en el colegio, de Franco o de Rocío Jurado. En el prólogo, el filósofo Paul B. Preciado avanza que esta propuesta es "un himno afectivo y político a aquellos que supieron, inventando estrategias de resistencia a la norma, arrancarse la máscara y construirse un rostro".

Y hablando de máscaras y de rostros divinos, la escritora e ilustradora acude inevitablemente a David Bowie. El año que nació Roberta Marrero, el artista británico publicaba su legendario álbum The Rise and Fall of Ziggy Stardust & The Spiders from Mars. Aquel verano, el 6 de julio, imaginamos que con Marrero dándose sus primeros baños como bebé en las playas de Las Palmas, Bowie apareció travestido en el programa de la BBC Top of the Pops interpretando Starman.

Cuatro millones de ingleses en shock estaban viendo esa noche por la tele a un alienígena con plataformas. A partir de aquel día el siglo XX cambió para siempre, y con él todos esos espectadores que entendieron que las cosas podían ser de otra manera, que vivir podía ser una aventura. Bowie nos hizo entender algo decisivo: que lo que la mayoría teme de la vida es justo lo que para algunos es la vida.

Portada del libro. Portada del libro.

Portada del libro.

Escribe la autora: "La influencia enorme de Bowie en la cultura LGTBQ+, en el feminismo y, en definitiva, en cualquier corriente de pensamiento en busca de un mundo menos opresivo tiene un poder primario, atávico, casi primitivo". Y con esa influencia como centro neurálgico, va narrando su liberación personal y el descubrimiento de muchas almas que le enseñaron el camino hacia la felicidad y los escudos para avanzar: "Mi arma más poderosa para luchar, para encontrarme a mí misma y mi lugar en el mundo, para entenderlo y así cambiarlo ha sido la cultura".

Y es un amplio panorama de ese espectro cultural el que va analizando desde su experiencia personal y colectiva, como cuando recurre a la famosa frase de la propia Rocío Jurado: "yo soy feminista porque ser feminista es defender a las mujeres"; a lo que Marrero añade: "escuchar esta frase tan simple y tan directa es un bálsamo entre tanta famosa que suelta perlas tipo no soy feminista porque tengo un hijo hermoso y un marido precioso o no soy feminista y nunca lo seré. Mujeres ingratas que parecen olvidar que, independientemente de que sean feministas o no, hoy pueden votar, abortar o coger un avión sin el permiso de un hombre gracias al feminismo".

Esta obra es válida tanto para el mentecato que dice que él, ni feminista ni machista (es decir, machista), como para la persona que busca su identidad y necesita referentes y apoyos para salir ahí fuera, o para la más avanzada que busca profundizar en teorías de género e igualdad. En definitiva, un libro necesario que va más allá de la literatura y construye sociedad e humanismo, futuro de ahora.

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