El Córdoba ha cerrado el primer tercio liguero como colista, con apenas 10 puntos en su casillero de los 42 en juego, lo que lo tiene ahora mismo a cinco de la salvación. Dejando patente que no hay más objetivo posible que pelear por la permanencia, las cuentas están claras: el conjunto blanquiverde debe doblar la puntuación obtenida en los primeros 14 partidos en cada uno de los dos siguientes bloques para alcanzar así los 50. Un reto para nada sencillo que tiene una primera y obligada premisa, que pasa por llegar con vida al mercado de invierno. Para eso se antoja vital salir airoso de los dos choque que restan para acabar el mes de noviembre ante un Sevilla Atlético que comparte situación en la tabla y una Cultural Leonesa que sólo tiene un partido de colchón con la zona de descenso.

Más allá de sensaciones, ausencia de revulsivo y, sobre todo, números, la dificultad del desafío que tiene por delante el CCF se resume en que tiene que conseguir prácticamente la mitad de los puntos que quedan por disputarse, que son 84. Y decir eso después de haber logrado apenas un cuarto de los puestos en juego hasta el momento no es la mejor forma de levantar el ánimo en una afición que empieza a hacerse la idea de lo que está por venir. Porque hacer un registro así significaría emular la trayectoria que están llevando los aspirantes a estar en el play off. Sin ir más lejos, el Valladolid o el Oviedo han cerrado este primer bloque del campeonato noveno y décimo, con esos 20 puntos, lo que los tiene a tres de la sexta plaza que otorga el último billete para estar en la postemporada.

En la era González, el tope son los 46 puntos con Paco; los 33 del año siguiente, la peor cifra

Para medir mejor el nivel de complicación basta con echar un vistazo a lo hecho por el Córdoba en sus cinco últimas temporadas en Segunda. Durante la era González, el mejor registro del equipo en los dos tercios finales son los 46 puntos que firmó bajo la batuta de Paco Jémez (temporada 10-11) y que le permitieron entrar en el play off. Por debajo quedan los 41 del primer ejercicio con José Luis Oltra, que también terminó con los blanquiverdes siendo eliminados en la semifinal de la fase de ascenso. Estos son los dos únicos cursos en los que el CCF superó los 40, pues en los otros tres, incluido el 13-14 que terminó con el salto a Primera, se quedó por debajo de una cifra que en estos momentos es imperiosa: 38 en esa histórica campaña, 37 el año pasado y 33, lo que supone la peor cifra, en la liga 12-13. Unos datos que registran una media de 39 puntos que, vista la igualdad de la categoría, podría valer apurando al máximo para conseguir la permanencia.

Pero para empezar a tener opciones reales de salvación se antoja clave reaccionar de manera inmediata y cerrar el año con una cifra lo más cercana posible a los 20 puntos. El calendario ofrece una doble ocasión antes de que finalice noviembre, empezando por la cita del domingo ante el Sevilla Atlético, que viene de conseguir su primera victoria, lo que le ha servido para ceder el farolillo rojo al CCF por su mejor goal average general. Una semana más tarde llegará a El Arcángel la Cultural Leonesa, un recién ascendido que está a dos partidos de distancia de los blanquiverdes, con tres puntos de renta con la zona de descenso, pero que está llamado a ser un rival directo por el objetivo actual, que no es otro que salvar la plaza en el fútbol profesional.