El Huesca siempre estará ligado a la historia del Córdoba por aquella primera visita a El Arcángel en junio de 2007. El 2-0 firmado por Pierini y Guzmán dio origen a una serie de cuatro victorias consecutivas de un equipo blanquiverde que sólo ha cosechado una derrota en sus nueve enfrentamientos, precisamente en la última visita oscense, el pasado febrero (0-2).

Pasado ya el efecto Luis Carrión que tuvo luz sobre todo en la Copa del Rey, el Córdoba se presentó ese 12-F con la amenaza de una zona de descenso a la que cayó como consecuencia de esa derrota. En un choque matinal, marcado por una nueva manifestación de la afición contra la gestión de la familia González, entonces bajo el lema #QueremosOtroCCF, los cordobesistas cayeron merced al doblete de Álvaro Vadillo en los minutos finales. Por cierto, ya entonces los visitantes disfrutaban de superioridad numérica por la expulsión, por roja directa, del que hoy es su jugador, Luso.

Hasta llegar a ese único triunfo, el Huesca se fue aproximando con tres empates en las cuatro visitas anteriores, con los que cortó la serie de derrotas que dio inició al historial de encuentros entre ambos, siete librados en el marco de Segunda División, más el primero en el play off y otro en Copa.

La última victoria blanquiverde ante la escuadra oscense se produjo en la campaña 11-12, la que inauguró la era González en el Córdoba. El equipo dirigido por Paco Jémez venció (3-1) gracias a un doblete de Airam Cabrera y un tanto más sobre la bocina de Borja García, que dejaron en nada el gol de penalti del capitán azulgrana, Juanjo Camacho.