La ausencia de Carlos Abad fue la nota más destacada del regreso a los entrenamientos del Córdoba. Los blanquiverdes volvieron al trabajo tras dos días libres, pensando ya en el duelo del próximo domingo ante el Mallorca (Son Moix, 18:00). En la sesión, llevada a cabo en el campo pequeño de la Ciudad Deportiva, no estuvo presente Abad, que sigue aquejado de esa "fuerte sobrecarga" a la que aludió el club para explicar su baja el pasado sábado.

De hecho, al arquero tinerfeño ni siquiera se le vio trabajando a parte en las instalaciones de Camino de Carbonell. Más tarde, en sus redes sociales personales, Abad colgó un vídeo en el que se le veía recibiendo tratamiento en el cuadriceps de su pierna derecha, la zona en la que los servicios médicos del club le detectaron "una fuerte sobrecarga" que le impidió sentarse en el banquillo en el partido de Copa del Rey ante el Getafe y ser de la partida ante el Extremadura. El arquero acompañó las imágenes con un mensaje optimista ("Ya queda menos"), aunque lo cierto es que su presencia el domingo en Son Moix es bastante complicada, tanto por lo complicado de una dolencia en un músculo vital para el trabajo de un portero como por el riesgo que supondría forzar su presencia si no se encuentra en las mejores condiciones físicas.

El meta titular trabajó en el estadio en la recuperación de sus problemas musculares

A falta de Abad, Sandoval completó el trío de porteros que entrenó ayer a sus órdenes con el joven del filial Llamas, que acompañó a Alberto González y a Lavín en una sesión en la que se vio especialmente acertado y activo al último, consciente de que con Carlos Abad fuera de combate las puertas de la titularidad se le abren de par en par para dar continuidad a su debut liguero el pasado sábado ante el Extremadura. Lavín, por cierto, protagonizó uno de los leves sustos de la sesión de trabajo, al recibir un golpe de Mena -que sigue trabajando con el grupo pese a encontrarse sin ficha desde el pasado mercado veraniego- en un hombro, justo una zona que le ha dado problemas en los últimos meses. El joven meta, sin embargo, se repuso sin problemas y pudo terminar la intensa sesión que se prolongó durante algo más de una hora. El otro pequeño susto de la jornada fue para Álvaro Aguado, que en la disputa de un balón con Quim Araujo recibió un golpe del que se dolió durante unos minutos, aunque ni siquiera necesitó la asistencia de los servicios médicos para continuar el trabajo.

Si finalmente Abad, como todo apunta, no se recupera a tiempo para estar en Mallorca, el único cambio que presentará el once inicial de Sandoval -salvo sorpresa- será en la punta de ataque. Y es que la expulsión de Piovaccari abre la puerta a tres hombres que pelearán por un puesto. Erik Expósito y Andrés Martín son los llamados a sustituir al italiano por tratarse de su demarcación específica, aunque el serbio Sasa Jovanovic también cuenta con muchas opciones de partir de titular como falso nueve.

Al rápido jugador balcánico le han sentado de maravilla los dos tantos conseguidos ante el Extremadura, y ayer se le pudo ver comenzando la semana de trabajo con ánimo y ganas de tener una oportunidad desde el inicio.

Por lo demás, parece claro que Sandoval dará continuidad al equipo tipo que viene alineando desde el duelo de Gijón y con el que parece haber encontrado los automatismos que encajan perfectamente con la idea de juego que tiene para este Córdoba. Durante una intensa hora de trabajo, el técnico madrileño incidió en un concepto que entiende clave en su equipo como es la presión a la salida del rival y la rápida circulación de balón. Dos señas de identidad que los futbolistas van asimilando de manera progresiva y que son las que han dado al equipo blanquiverde un mejor aire.