A una media espectacular de dos puntos por partido, el Córdoba de José Ramón Sandoval ha necesitado apenas diez encuentros para pulverizar sus registros de las 26 fechas anteriores. Con un balance de seis victorias -la última el viernes ante el Sevilla Atlético que de momento mantiene a los blanquiverdes fuera de la zona de descenso-, dos empates y apenas dos derrotas, el rendimiento que el preparador madrileño está sacando a esta plantilla remozada en enero es sobresaliente. Esos 20 puntos sobre 30 ya han dejado en nada los 19 que tenía el equipo a su llegada, lo que se ha traducido en una recuperación que ha dejado el milagro de la permanencia a tiro de piedra de cara a las últimas seis jornadas de competición.

Sandoval fue señalado como la última bala para tratar de salvar un proyecto a la deriva que ya había quemado dos partidos tras el cierre del mercado de invierno con otras tantas derrotas. Cogió al CCF a once puntos de la salvación, pero desde el primer día se mostró plenamente convencido de que era posible revertir la situación. Ni siquiera el varapalo que supuso la remontada in extremis del Granada en su debut, que alejaba el objetivo a 13 puntos, mermó su moral. Más bien, la fortaleció. Y desde ahí, con trabajo mental, físico y sobre todo táctico, empezó a construir el equipo que hoy lleva dos días fuera del descenso.

2Puntos. Es el promedio que lleva Sandoval, con un balance de seis triunfos, dos empates y dos derrotasEn el peor escenario posible, el Córdoba se quedará hoy a sólo un punto de la salvación

Desde aquel día, el Córdoba ha sumado 20 puntos de 27, los mismso que un Rayo Vallecano que es segundo y pelea por el ascenso directo, y sólo menos que el Sporting y el Zaragoza, en la misma guerra. Una cifra que el cuadro cordobesista alcanzó el viernes con una goleada sobre el colista Sevilla Atlético para llegar a los 39 en la clasificación. Porque en las 26 primeras jornadas del torneo, el bagaje únicamente fue de 19 puntos a pesar de quemar hasta tres entrenadores.

Luis Carrión, el encargado de abrir la temporada, firmó nueve puntos en una decena de partidos (0,9 de media). Un paso por detrás se quedó Jorge Romero, la última apuesta de la familia González, que consiguió siete en nueve fechas (0,78). Entre uno y otro, el encargado de dirigir la nave fue Juan Merino, que sólo sumó tres en siete choques (0,43). En total, 19 puntos en 26 jornadas (0,73 de promedio), unos guarismos que Sandoval se ha encargado de reventar en apenas dos meses, en sólo diez partidos, para cambiar por completo el horizonte que se sitúa delante del cordobesismo.

Porque con los 39 puntos a los que el Córdoba llegó el viernes, el escenario que se le presenta tras esta jornada 36 no puede ser más optimista. De momento, tras continuar ayer la jornada con cuatro partidos más, el equipo blanquiverde se mantiene fuera de la zona de descenso. Es más, en el peor de los escenarios posibles, el objetivo estará esta noche a sólo un punto, cuando hace apenas un par de meses se veía a 13 (14 ya en el transcurso de aquel duelo ante el Valladolid en el que el penalti parado por Pawel significó un punto de inflexión).

La derrota del Almería en La Romareda ante el Zaragoza (2-1) garantiza que la distancia no se pueda ir más allá del punto. Ahora mismo, los blanquiverdes se mantienen fuera, pero empatados a 39 puntos con la Cultural Leonesa, que juega en Granada, y con dos más que el Barcelona B, que recibe al Rayo Vallecano. Ese escenario maldito lo provocarían la victoria azulgrana y la no derrota de los leoneses en Los Cármenes, lo que dejaría a la escuadra de Sandoval de nuevo entre los cuatro últimos. Pero con todo, incluso en el peor de los casos, la jornada ya está siendo positiva para los intereses cordobesistas.