Desde el pasado 1 de enero, cuatro jugadores del Córdoba son libres para negociar con otros clubes: Pawel, Caro, Aguza y Edu Ramos. Todos acaban contrato el próximo 30 de junio, al igual que José Antonio Reyes, fichado ya bajo el manto de Jesús León y Luis Oliver, fecha en la que también tocarán a su fin las cesiones de Noblejas (Rayo Vallecano), Narváez (Betis) y Jauregi (Cádiz). En duda está la situación de Montelongo, hoy sin ficha, pues llegó a un acuerdo por esta temporada prorrogable en una más en caso de que el equipo mantenga su plaza en Segunda División.

Al margen de Pawel, con el que ya hay contactos, y Reyes, cuya situación sólo podría estudiarse en caso de salvación, el resto de jugadores que acaban contrato entran en ese perfil de futuribles teniendo en cuenta su rendimiento. Edu Ramos ya ha deslizado que le gustaría seguir incluso en Segunda B y hoy en día es pieza fundamental en la medular cordobesista, donde el pasado domingo formó pareja con un Sergio Aguza que nunca ha ocultado su descontento con la anterior propiedad por cómo hizo efectiva la cláusula para su renovación automática el pasado verano; ahora con la nueva, las puertas están abiertas de nuevo... Y luego está el caso de Caro, que ha perdido protagonismo en las últimas semanas, pero se considera ese buen comodín para cualquier puesto de la defensa. En algún caso, seguro que el club no tiene prisa, pero en otros, quizás haya novedades...