El Córdoba CF se desplaza este sábado hasta las instalaciones de Montecastillo, en Jerez de la Frontera, para disputar su segundo amistoso de pretemporada con el Almería como rival. Una prueba, que arrancará a las 19:30, ante un equipo de Primera División que exigirá al conjunto de Germán Crespo y que puede suponer una buena vara de medir para comprobar en qué estado se encuentran los blanquiverdes después de dos semanas de trabajo estival.

Tras el dulce estreno ante el Granada en El Arcángel, el calendario de amistosos del CCF depara el rival quizás con más entidad. Y es que el Almería está ya inmerso en la preparación de una temporada que para ellos supone el regreso a la máxima categoría del fútbol español, después del ascenso conquistado hace apenas unos meses. Los rojiblancos, que tienen un proyecto ambicioso que quieren consolidar en la élite, cuenta con futbolistas de bastante nivel como el delantero Umar Sadiq, los mediapuntas Pozo y Ramazani, el centrocampista Robertone o los defensas Chumi, Akieme y Babic. Una plantilla plagada de jugadores internacionales a la que se ha sumado en las últimas semanas el brasileño Kaiky Fernandes o el serbio Marko Milanovic, aunque Rubi espera más refuerzos en las próximas semanas.

Germán Crespo volverá a repartir minutos entre sus jugadores, procurando que las cargas de trabajo se equilibren entre toda la plantilla, pero sin perder de vista las probaturas que el técnico quiere ir realizando para encontrar el mejor rendimiento posible a su equipo. Los jóvenes del filial que se ejercitan desde el arranque de la pretemporada con el primer equipo volverán a tener protagonismo, debido a los problemas físicos que arrastran varios componentes del plantel.

Y es que no se espera que el Córdoba arriesgue lo más mínimo y por ello están descartados para este segundo amistoso del verano los lesionados Ekaitz Jiménez y José Alonso. Además, Carlos Marín y José Manuel Calderón son también duda. Tampoco está garantizada la presencia de José Cruz y José Ruiz, ambos con algún pequeño contratiempo que les ha hecho parar o trabajar a menor ritmo durante la semana.

Más allá de esas ausencias, normales cuando empieza a acumularse el trabajo de pretemporada, el Córdoba se marca como objetivo en su segundo amistoso el progresar en la idea de juego mostrada ante el Granada, a la vez que se siguen cargando las piernas con minutos de competición para lo realmente importante, que llegará a finales de agosto con el inicio de la Primera RFEF.