Después de dos interinidades, en las que ya dejó resultados, a Fran Fernández le llegó hace tres semanas la oportunidad de su vida. Y no está dispuesto a dejarla escapar. El Brujo del Zapillo, como ya es conocido, ha reactivado al Almería en un tiempo récord para dejarlo a un pasito de la permanencia, con una receta sencilla: echar el cerrojo en la meta propia. Con cero goles encajados en las últimas tres fechas, el conjunto rojiblanco ha firmado siete puntos de nueve posibles que le han dado un colchón de cuatro sobre la zona de descenso, con nueve en juego.

A esas dos victorias ante el Barcelona B (1-0) y el Granada (2-0) en el Mediterráneo, y el empate sin goles en Tenerife, que el Almería ha logrado tras la dimisión de Lucas Alcaraz, hay que añadir otro triunfo, en la primera vuelta, pues Fernández ya hizo de puente entre el técnico granadino y Luis Miguel Ramis. Entonces, los rojiblancos se impusieron al Zaragoza (3-0). Un balance espectacular que ni siquiera se ve afeado con su primera interinidad -entre Soriano y el propio Ramis-, la campaña pasada: triunfo 1-2 en Lugo, en la que fue la primera alegría a domicilio de los indálicos -y el único partido en el que su equipo ha encajado- y un 0-0 ante el Huesca, ya en casa.

Verza tiene difícil llegar, pero el Almería confía en recuperar a Lass y Caballero para Córdoba

Pero, ¿qué teclas ha tocado Fran para reactivar al Almería? A decir verdad, pocas. El cuadro rojiblanco mantiene un 4-2-3-1, si bien ahora juega con las líneas más juntas, amén de tener un plus de motivación y confianza provenientes del banquillo. Su idea es hacer los partidos muy largos, esperando el fallo del rival o un acierto a balón parado, sin lugar a las prisas.

En cuanto a nombres, las lesiones de Owona y el exblanquiverde Morcillo le empujaron a tirar de Joaquín y Trujillo como centrales, con Motta en la diestra y Pervis en la siniestra, y por ahora la protección que la línea otorga a René no puede ser mejor. Por delante, la apuesta de Fran es Sulayman, un pivote defensivo con algún que otro error grosero en la salida, que alivia de trabajo a Rubén Alcaraz. Su otra gran decisión ha sido recuperar al excordobesista Fidel, que ahora aparece a pie cambiado para dejar a Nano ayudando a Pervis. Arriba, Pozo e Hicham se alternan de enganche y Juan Muñoz aparece por delante de Caballero tras su doblete ante el Granada.