La Asociación de Vecinos Torre Malmuerta, tras el derrumbe esta semana de parte de la muralla romana en la calle San Fernando, ha vuelto a alertar al Ayuntamiento de Córdoba, como viene haciendo desde hace casi un año, sobre “el mal estado de conservación” que presenta la Torre de la Malmuerta, especialmente su arco, que constituye la conexión peatonal entre la Plaza de Colón y la Avenida de Ollerías y que es muy transitado.

El presidente de dicha asociación vecinal, Jesús Padilla, ha recordado que “el 19 de noviembre del pasado año” ya puso en conocimiento de la Delegación de Cultura y de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) del Ayuntamiento “la necesidad de realizar algunas obras de conservación de la Torre de la Malmuerta, especialmente de la bóveda del paso de ronda (arco de la torre), y que dicha petición también se presentó a la Junta Municipal del Distrito Centro el 3 de diciembre de 2018, “pero no fue atendida”.

Por eso, “ante el derrumbe de la muralla” de la calle San Fernando, la asociación vecinal ha “vuelto a realizar la petición” de que se atienda “esta necesidad, a fin de evitar cualquier desagradable incidente en un lugar tan transitado y en un monumento nacional tan valioso”, máxime cuando lo que demandan, a su juicio, es “razonable”, y lo hacen “por el bien del monumento y de la seguridad de las personas que transitan por este lugar”.

La Asociación de Vecinos Torre Malmuerta acompaña su nueva solicitud de intervención al Ayuntamiento de un informe en el que detalla, con numerosas fotografías, los principales problemas de conservación que afectan al monumento, que de forma general está aquejado del mal de la piedra, haciendo alusión especial, por el peligro para los peatones que puede suponer un posible derrumbe, al estado del arco de paso.

En el informe se destaca el “mal estado y deterioro que está sufriendo la piedra exterior, a causa de la acción de los agentes atmosféricos, la contaminación y, muy especialmente, por la actividad de las palomas, en el arco de la torre, la zona de acceso al salón y en el sector de la escalera exterior, siendo prioritaria acometer, sin duda, la primera de las actuaciones”.

Además, en el informe se indica que el arco “es un elemento sensible fuertemente deteriorado, especialmente por la acción de las filtraciones de agua y de las palomas”, y dado que “por debajo del mismo transitan multitud de personas, pues el paso obligado entre la Plaza de Colón y Ollerías, estimamos que es urgente realizar obras de consolidación del mismo y de sellado de los huecos creados por las palomas en sus dovelas, pues un desprendimiento de éstas podría tener graves consecuencias personales”. ’