Los sindicatos insisten en su empeño de denunciar la falta de profesores que hay en Córdoba y las consecuencias que acarrea esta situación, como es la pérdida de calidad en unas aulas que ayer volvieron a cobrar vida. El llamamiento de las organizaciones sindicales fue uno de los hechos relevantes de la que fue la primera jornada del curso escolar 2016-2017, que arrancó de manera oficial con la incorporación de hasta 73.031 alumnos en el segundo ciclo de Educación Infantil y de Educación Primaria. Un día que transcurrió, según fuentes de la Delegación del Gobierno de la Junta, sin que se registrasen incidencias.

No obstante, los sindicatos volvieron a incidir en que son necesarios más profesores. Así, la responsable del área de Enseñanza de CSIF, Elena García, subrayó la falta de hasta un millar de docentes y criticó que también en la primera jornada del curso escolar haya sido cuando se han hecho los llamamientos para que los profesores cubrieran las bajas pertinentes. UGT, por su parte, llevó su denuncia a la puerta de la Delegación de Educación con una protesta contra los recortes y "por una educación de calidad", según el secretario general de empleados de servicios públicos, Isaías Ortega, quien criticó también "la precipitada y no negociada implantación de la segunda lengua extranjera -Francés- y la supresión de las horas de preparación del profesorado bilingüe". Una medida que, según sus cálculos, ha dejado fuera a 90 interinos sólo en Córdoba. Ortega también alertó del cierre de unidades en Infantil y el hecho de que las bajas del profesorado no se cubran hasta los 15 días.

Otro sindicato que criticó la falta de financiación en la enseñanza por parte de la Consejería de Educación fue CCOO y el secretario general del área de Enseñanza, Francisco Javier Delmás, aseguró que "los datos de vacantes adjudicadas al profesorado interino y funcionario para el curso ponen de manifiesto que no se cubren las necesidades de la educación andaluza teniendo en cuenta los nuevos retos del sistema educativo y las numerosas jubilaciones que se están produciendo entre el profesorado".

Ustea, por su parte, también incidió en que los recortes "siguen profundizando el deterioro del servicio educativo público un año más". Señaló que "la implantación incorrecta del Francés su pone la pérdida de horas en otras áreas", además de denunciar "el cierre de aulas y el despido de profesorado" en la escuela pública.

Sin entrar a valorar las críticas, las delegadas del Gobierno, Rafaela Crespín, y de Educación, Esther Ruiz, fueron las encargadas de dar el pistoletazo de salida al curso en el colegio Urbano Palma, en la localidad de Santaella. Allí, Crespín hizo una defensa "de la educación universal, pública, gratuita y de calidad" y consideró que la enseñanza es "una inversión de futuro", además de destacar "su papel transformador de la realidad social y equilibradora de las desigualdades". La delegada sí que hizo referencia a la implantación del Francés como segunda lengua extranjera, de la que consideró que es "una nueva oportunidad que el sistema público andaluz de educación aporta a los niños a partir de este año". También aludió al profesorado como "base, fundamento y protagonista del sistema público de enseñanza" y expresó "el respeto y el apoyo de la Junta, así como el agradecimiento de toda la comunidad educativa por su profesionalidad, dedicación y compromiso con los valores de una sociedad democrática y solidaria".

Las familias también han mostrado su preocupación al respecto. Así, uno de los principales retos para el presidente de la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de centros públicos (FAPA-Ágora), Francisco Mora, es que este curso "los niños estén atendidos; eso es lo más importante". A su juicio, "no se puede perder el apoyo educativo y la organización del centro es clave para el reparto de las tareas docentes".

La vicepresidenta primera de la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos (Concapa), María Luisa Lucena, por su parte, destacó la ausencia de incidencias en la primera jornada del curso, al tiempo que defendió la puesta en marcha de un pacto por la Educación.

Será el próximo jueves cuando las aulas de Córdoba estén al completo, una vez que se incorporen todos los alumnos de Secundaria, Formación Profesional y Bachillerato, que sumarán más de 169.000 estudiantes.