Más de 200 personas con adicción a los juegos de azar son atendidas en Córdoba con la colaboración de del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y otras entidades como son la Asociación de Jugadores en Rehabilitación (Acojer)y la Diputación de Córdoba a través de la Unidad de Adicciones.

En concreto, 161 de estos pacientes son tratados a través de los programas de Acojer, a los que se suman las 47 personas que reciben ayuda a través de la institución provincial. Además, en ambos casos se realiza asistencia a menores con este tipo de adicción, sumando un total de siete en Córdoba (tres a través de Acojer y cuatro con la Unidad de Adicciones). Estos datos se han dado a conocer con motivo del Día Sin Juego de Azar, que se celebra hoy.

Un dato relevante dentro de estas cifras es que, en total, son sólo ocho las mujeres que solicitan este tipo de asistencia, una de ellas a través de la Unidad. Esto supone que el 96% de las personas afectadas por la ludopatía y que reciben ayuda para combatirla son hombres. Esta dinámica se da a nivel autonómico, ya que Salud registra que de 1.651 pacientes activos en Andalucía y únicamente son 105 las mujeres atendidas.

Acojer celebra su semana cultural en torno al Día Nacional Sin Juego de Azar con el objetivo de concienciar sobre el efecto de la ludopatía en los pacientes y dar visibilidad a la asociación y la atención que ofrecen. Su presidente, Salvador Secilla, ha detallado que se celebrarán tres charlas informativas en la sede de la asociación y se colocarán tres mesas informativas –en el Centro de Salud Castilla del Pino, en Jesús Rescatado y en la Glorieta de la Fuensantilla– para “dar información de nuestra actividad y sobre la incidencia de la adicción”.

Las charlas abordarán temas como “la autorressponsabilidad, el cerebro y las conductas adictivas o la inocencia robada, que habla sobre el abuso a menores”.

Secilla ha hecho hincapié en que “el número de personas que necesitan atención va aumentando, antes teníamos seis o siete registros nuevos al mes y ahora vamos por 15”. Además, ha apuntado que es “alarmante” la edad de las personas afectadas por la ludopatía, que está “bajando de forma contundente”, como demuestra además el caso de los tres menores que la asociación trata actualmente.

Los menores son asistidos “siempre que tengan el consentimiento de los padres”, por lo que recuerda que “los familiares siempre sufren igual que los pacientes”.

Por su parte, la Unidad de Adicciones de la Diputación de Córdoba coordina su asistencia con la Junta a través de los centros de salud, donde presta sus servicios. El coordinador de esta unidad, Luciano Cobos, ha detallado que la atención “se realiza de forma diferenciada en caso de que el paciente sea menor”.

En estos casos, el enfoque se lleva al aspecto educativo, ya que “el juego puede ser un problema añadido a otros problemas que los menores pueden presentar”, por lo que también ha insistido en la relevancia de las familias “como parte del proceso, por ser apoyo para la persona tratada y a su vez afectados por la situación”.

Para los adultos, el tratamiento aborda la “deshabituación” de los pacientes, desde un punto de vista sanitario y psicológico que explore “los criterios de dependencia que en mayores se ven de una forma más clara”. Para conseguir tratar la ludopatía de forma eficiente, la unidad plantea “un abordaje integral, con objetivos claro y marcados que estén encaminados a generar un cambio en la actitud que ha provocado que los paciente demanden este tipo de asistencia”, ha recalcado Cobos.

El coordinador de la unidad también ha puesto el foco en las familias de los pacientes adultos, las que ha valorado que “se ven desbordadas” por la situación y, al igual que en el caso de los menores, también son una parte esencial del proceso de recuperación del paciente.

La Unidad de Adicciones realiza esta colaboración desde 2002 a través de los centros de salud cordobeses y del Centro de Servicios Sociales Comunitarios Sur para el trabajo con lo pacientes menores de edad.