El Ayuntamiento de Córdoba y Sadeco deberán indemnizar a un hombre que se cayó tras la Semana Santa de 2017 en un paso de peatones como consecuencia de la cera que las procesiones habían dejado a su paso.

En una sentencia facilitada a Efe, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número cinco de Córdoba condena a la institución y su empresa pública a abonar 1.886,58 euros por los 36 días que el demandante tuvo una pérdida temporal de calidad de vida.

Ello lo hace en base a que el juez Ángel Gabriel Pérez Pérez entiende que hubo un "defectuoso funcionamiento del servicio público que tiene encomendado" por Ley el Ayuntamiento, que no es otro que el "cuidado y atención de calles y otros espacios públicos".

Asimismo, adjudica la responsabilidad a la institución municipal por corresponderle la autorización del paso de las cofradías, sobre las que la sentencia no considera acreditado que incumpliesen ninguna condición que le hubiese impuesta para hacer la estación de penitencia, aunque da pie al Ayuntamiento para que, "si a su derecho entienden que proceden", reclame a éstas los perjuicios causados, en este caso la indemnización a la que es condenado.

No admite la resolución judicial que el Ayuntamiento de Córdoba trate de desviar la responsabilidad a su empresa de limpieza viaria por haberle encargado la gestión del servicio público, ya que la jurisprudencia adjudica al titular de la competencia la culpa de su incumplimiento.

En la misma línea, rechaza que Sadeco argumentase que había limpiado la zona. "Si bien pudiera ser difícil la total limpieza inmediata de la vía, sí resulta exigible atenuación de la peligrosidad de aquella con los medios que resulten necesarios", señala el juez.

El accidente ocurrió el 18 de abril de 2017, martes posterior a la Semana Santa de ese año, en la calla San Pablo, donde el Ayuntamiento había colocada carteles con la advertencia de la existencia de cera en el pavimento.

Este hecho invita al juez a reducir en un 30 por ciento la indemnización solicitada en un principio por el demandante, que era de 2.877,35 euros, al entender que tuvo una "culpa recurrente" en el accidente.