Vivienda Vimcorsa enseña los pisos a los propietarios de la promoción en la calle Isla Fuerteventura

Las llaves que abrirán la casa de sus vidas

  • Los propietarios de 71 VPO de Noreña conocieron ayer el que será su hogar

Tres dormitorios, dos baños, un salón, cocina, cochera y trastero. La casa ideal para muchos cordobeses será pronto una realidad para los 71 afortunados del sorteo que realizó Vimcorsa en diciembre de 2004 y a los que se adjudicó una de estas viviendas situadas en la calle Isla Fuerteventura 53, en el barrio de Noreña.

Los futuros propietarios pudieron acercarse ayer a los inmuebles para conocer su dimensión y hacerse una idea del que será su hogar. Una vivienda propia, con cochera incluida, por 240 euros al mes con opción de compra por poco más de 60.000 euros. Toda una ganga, "como si nos hubiera tocado la lotería", comentaba ayer Sergio Valenzuela, uno de los afortunados. "Esto sólo pasa una vez en la vida y estamos muy contentos" decía. Y es que junto a su mujer, Eva del Río y sus tres hijos -uno de ellos viene en camino- formarán un hogar dentro de unos meses, cuando definitivamente Vimcorsa les entregue las llaves. A los niños les llamaba la atención el jardín, de unas grandes dimensiones "para poder jugar"; y los padres, encantados con la distribución de la casa y la cochera. Hasta ahora vivían de alquiler en Gran Vía Parque, pero pronto iniciarán una nueva etapa en su vida que afrontan "con mucha ilusión". Para ellos, cambiar de barrio no va a suponer ningún problema "porque es para mejor", aseguraban.

Desde las 11:00 y hasta las 17:00 no dejaron de pasar los futuros habitantes. Todavía no están amuebladas y los residentes aprovecharon para tomar medidas de las habitaciones y diseñar así la decoración que lucirán sus casas. Metro y cuaderno en mano elaboraban pequeños planos del piso que pronto ocuparán. "Ésta será nuestra habitación y las otras para los niños"; "podemos reutilizar los muebles del dormitorio del pequeño, pero los demás los compraremos", eran algunas de las frases que se oían entre las familias.

Francisca Vélez es otra de las afortunadas. Se quedó viuda hace poco tiempo y el nuevo piso que ocupará es una gran oportunidad para intentar continuar con su vida. Ayer acudió acompañada de una de sus hijas para ver el edificio. "Me encanta, los espacios están muy bien distribuidos y aprovechados y las vistas son magníficas", comentaba. "Nos han dicho que pronto nos darán las llaves para disfrutar de la casa; esto es un regalo que nos ha caído del cielo", argumentaba. José Antonio León también pudo conocer ayer su próxima vivienda que "está muy bien", con la sensación de un sueño hecho realidad.

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