Los funcionarios de prisiones que están en huelga en toda España en protesta por los incumplimientos del Gobierno Central sobre sus reivindicaciones laborales, en el caso de Córdoba cortaron en la mañana de ayer, durante unas horas, como ya ocurriera el domingo, el acceso al Centro Penitenciario de Alcolea, en una movilización donde también se quemaron neumáticos.
Al respecto, hasta la cárcel cordobesa tuvieron que acudir los bomberos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) y los agentes de la Policía Nacional para escoltarles a la hora de apagar el pequeño incendio que se produjo y que imposibilitaba el acceso a la prisión.
Desde el colectivo de funcionarios que convocan esta manifestación señalaron que a las 10:00 de ayer los servicios mínimos aún no habían entrado en la cárcel de Alcolea y el seguimiento de la huelga por las noches alcanza el 100%, mientras que por las mañanas llega hasta el 90%. En total, son cuatro jornadas de huelga convocadas desde el pasado sábado -y que finalizan hoy- por los sindicatos CCOO, Acaip, CSIF, UGT y CIG en los 84 centros de Instituciones Penitenciarias de España.
Como ya explicaran en su día los sindicatos, esta huelga se lleva a cabo "por la actitud inmovilista de la administración penitencial" y después de otras dos más convocadas el mes pasado. Todo ello, insistieron, para exigir al Gobierno el desbloqueo del conflicto laboral que desde hace más de un año mantienen con la administración penitenciaria.
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