Elecciones autonómicas

De la estabilidad a la lucha por protagonizar el cambio

  • El PSOE arranca la campaña defendiendo su continuidad y el resto se erigen como las únicas fuerzas para lograr la alternancia

Candidatos y dirigentes del PSOE de Córdoba junto al Palacio de Congresos de la  calle Torrijos.

Candidatos y dirigentes del PSOE de Córdoba junto al Palacio de Congresos de la calle Torrijos. / Jordi Vidal

La campaña electoral ya está aquí, a pesar de que se tenga la sensación de que estamos en una campaña política continua. La tradicional pegada de carteles arrancó en la medianoche y, hasta el 1 de diciembre, los partidos políticos con opciones de estar representados en el Parlamento de Andalucía centrarán sus mensajes en dos extremos. Por un lado, el mensaje de la estabilidad al que apela el PSOE para defender que debe continuar en el Gobierno tras casi 40 años. Por otro, el que repetirán PP, Ciudadanos y Adelante Andalucía: que ha llegado la hora del cambio. Estos tres partidos se sitúan en la misma guerra y todos luchan por arrojarse el protagonismo en una campaña que, eso sí, califican de histórica.

La reciente encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) marca sin duda este arranque, pues deja a un PSOE intratable con cinco diputados -uno más que ahora-, mientras que Adelante Andalucía sería la segunda fuerza con tres representantes y PP y Ciudadanos tendrían dos cada uno. Unos resultados que, por el momento, todo el mundo ha querido dejar en cuarentena, sobre todo el PP, pues deja incluso a su presidente provincial, Adolfo Molina, sin representación en el Parlamento si se atienden a estos datos. Precisamente Molina, número tres de la candidatura, dijo ayer que la encuesta "se había pasado de cocina" y aseguró que los populares afrontan "todavía con más ilusión la campaña". "Todo cordobés que quiera un cambio a mejor en Andalucía tras 40 años de socialismo, que nos ha dejado a la cola de todo lo bueno y a la cabeza de todo lo malo, debe saber que la única garantía de cambio es Juanma Moreno y el PP".

Los populares han elegido la plaza de San Nicolás, donde se ubica la sede de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía, para escenificar este arranque de campaña y la tradicional pegada de carteles que ha contado, además de con el presidente del partido, con la candidatura prácticamente al completo, liderada por José Antonio Nieto, quien pidió a los cordobeses que sean "inconformistas" en esta campaña. "Que nadie se conforme ni se resigne a pensar que no hay forma de acabar con el paro ni con el fracaso escolar en Andalucía, existe otro modelo, un cambio político que solo puede liderar el PP", añadió. Los populares han planteado una campaña intensa, con muchos municipios y muchos barrios. Es lo que les queda tras las alarmantes encuestas. De hecho, estará Juanma Moreno todo el día en la provincia y el sábado visitará la capital el líder del PP, Pablo Casado.

El PSOE, por su parte, se ha desplazado al Palacio de Congresos de la calle Torrijos. El que otrora fue el gran símbolo de la mala gestión de la Junta se ha convertido, desde su reapertura en octubre, en el gran aliado y casi el único aval representativo de la Junta en Córdoba. Allí han estado también el secretario general del PSOE cordobés, Antonio Ruiz, y la lista socialista al completo, con Juan Pablo Durán a la cabeza. El presidente del Parlamento ha asegurado que se inicia una campaña "ilusionante, llena de alegría" ya que "vamos a recorrernos Córdoba para llevar nuestras propuestas en positivo y hacer más Andalucía". Durán ha pedido el voto para "hacer más Andalucía". El secretario general de los socialistas cordobeses, por su parte, ha asegurado que su partido "sale a ganar estas elecciones, porque tenemos el mejor equipo, las mejores propuestas y a la mejor candidata, Susana Díaz". "Los y las socialistas estamos con las preocupaciones de la ciudadanía, en resolver los problemas de la gente. Somos los únicos con propuestas y con un compromiso serio con esta tierra". El secretario general del PSOE de Córdoba considera que "es garantía de estabilidad y de progreso, de defensa del Estado del Bienestar y eso es lo que siempre han valorado los andaluces en las urnas".

Adelante Andalucía se ha convertido en la coalición-revelación después de que el CIS lo sitúe como segunda fuerza política más votada en Córdoba. Aunque, como ya se ha dicho, todo hay que ponerlo en cuarentena, la candidatura de izquierdas se erige como la única posible artífice del cambio. La número uno de Adelante Andalucía, Ana Naranjo, ha apelado al voto de "los jóvenes, para que no tengan que emigrar más", así como de los movimientos andalucistas de izquierdas" y a los colectivos que luchan "por la igualdad y la cohesión social". "Pedimos a todos los andaluces que no se queden en su casa el 2 diciembre, que acudan a las urnas porque es importante decidir por el futuro de nuestra tierra" ha insistido Naranjo desde el mirador de Osario Romano, en el Campo de la Verdad. Este lugar es significativo para IU porque el nuevo mirador fue un proyecto impulsado por el área de Infraestructuras del Ayuntamiento, liderada por la edil de IU Amparo Pernichi.

El número dos de Adelante Andalucía, David Moscoso, también se dirigió a "los antiguos votantes del PSOE que han perdido su confianza en ese partido, pero no en que Andalucía sea una tierra de progreso". Para David Moscos esta es "la campaña más importante para Andalucía de todas las que ha vivido" y la afrontan con "toda la ilusión y todos los deseos de cambio".

Ciudadanos es otro de los partidos que sabe que tiene que dar el resto si quieren que salga la suma con el PP y tener opciones de gobierno. Por el momento han sido los más discretos a la hora del arranque de la campaña, pues han elegido su propia sede, en la zona del Vial Norte, para escenificar la tradicional pegada de carteles. El número uno de la formación naranja, Francisco Carrillo, aseguró ayer que "en más 35 años cambiamos de vivienda, de coche o de móvil; por qué no vamos a cambiar de gobierno". Ciudadanos cree que "los cordobeses ya están hartos" y que "hay que devolverles la sonrisa". Entre las medidas que adoptará Cs si llega a la Junta es "auditar las cuentas", precisó el candidato.

El representante de Cs ha resaltado que "las ganas de cambio son palpables, los cordobeses tienen ganas de cambio y lo noto en las calles y en los municipios que visito. Pero quieren un cambio con ilusión, que no se convierta en un y tu más de siempre, sino un cambio que genere oportunidades".

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