Córdoba perdió más trabajadores de los que ganó durante el año pasado. Así lo pone de relieve un informe publicado por la empresa de recursos humanos Randstad, que analiza la tasa de movilidad laboral de las distintas provincias españolas, es decir, analizar el resultado tras calcular los trabajadores que entran en un territorio y los que salen del mismo.

En el caso de Córdoba, durante el año pasado entraron en la provincia (provenientes de otros puntos de España) 66.567 trabajadores que habían firmado un contrato para trabajar aquí. Mientras que, en ese mismo periodo, fueron 98.850 las personas que abandonaron la provincia para poder trabajar en otros puntos de la geografía española.

Esto deja la tasa de movilidad laboral de Córdoba en un 14,4%, con 4.409 trabajadores menos en la provincia de saldo.

Dentro de las provincias andaluzas que pierden masa laboral por la movilidad hacia otros territorios, Córdoba no es la peor situada. En Cádiz ese saldo superó los 71.000 trabajadores, a la cabeza indiscutiblemente en este caso. Solo dos provincias andaluzas consiguieron que entraran más trabajadores de los que salieron, Jaén y Málaga.

Según el director de Relaciones Institucionales de Randstad, Luis Pérez, "en los últimos años, la movilidad interprovincial no está dejando de crecer, aupada por la recuperación del empleo en nuestro país. Este año las cifras son históricas, lo que deberíamos considerar como una buena noticia, ya que este tipo de contratación es especialmente útil para jóvenes en búsqueda de una primera experiencia laboral o profesionales que no están encontrando oportunidades en sus lugares de origen".