Transcurrida ya una semana desde que el Gobierno decretara el estado de alarma para frenar el coronavirus, las ciudades han cambiado por completo su panorama. Un sábado de calles vacías se dibuja ahora en Córdoba, a excepción de aquellos que tienen que acudir a trabajar o de quienes, sin compañía, se dirigen a los mercados para llenar la nevera.

Las noticias que llegan sobre el avance del covid-19 caen a tropel, desde el parte de afectados y fallecidos, hasta aquellas que cuentan el número de empresas que han realizado expedientes de regulación de empleo temporales. Entre la cascada de informaciones que nos ponen los pies en la tierra también aparecen buenas noticias, como todas esas que llevan adjuntos los vídeos de los aplausos que tarde tras tarde se suceden para apoyar a los que se están dejando la piel en estos días de confinamiento.

Entre las noticias de perfil positivo, desde el Día hemos querido introducir los mensajes de ánimo y esperanza de aquellos que acaban de pasar por todo esto. Son cordobeses residentes en China, el país donde el virus empezó a expandirse y que ha servido de ejemplo a muchos otros para empezar a aplicar medidas difíciles, pero necesarias.

Laura Medina y José Sánchez son dos cordobeses que desde hace varios años residen y trabajan en Shanghái. Ellos también han sufrido las consecuencias de esas medidas de aislamiento decretadas para frenar al virus y ahora, casi dos meses después, pueden contar que han salido adelante.

Laura Medina es investigadora postdoctoral en el Shanghai Center for Plant Stress Biology y su trabajo se centra, como ella misma relata, en el estudio de los mecanismos moleculares de las interacciones planta-virus. Como cuenta en el vídeo que acompaña a esta información, hace dos meses empezaron a aplicarse allí todas las medidas frente al avance del virus y después de tanto tiempo, "la vida vuelve a la normalidad, se recupera el ritmo habitual".

Por su parte, José Sánchez es Business Development manager en la empresa Dragon Trail Interactive y, aunque ahora reside en Shanghái, también ha vivido en Pekín. En el vídeo recuerda que el caso de China puede ser "el claro ejemplo de que se puede salir adelante" si "estamos unidos, somos solidarios y, sobre todo, nos quedamos en casa".