La primera remesa de altas médicas que los servicios sanitarios de Córdoba han remitido en el presente mes de octubre ha permitido frenar la tendencia alcista que la pandemia del Covid-19 viene mostrando en las últimas semanas. La notificación, de una tacada, de 650 nuevas personas que han dejado atrás la infección, al menos con carácter oficial, aunque en muchos casos ha quedado demostrado que mantienen secuelas de la enfermedad, pone fin a una serie de alrededor de 20 días en los que apenas si se había comunicado una recuperación, lo que también influye de manera positiva en otros parámetros.

Principalmente, en el aspecto meramente numérico, en los casos activos, o aquellas personas que tienen la capacidad de transmitir el virus SARS-CoV-2. Después de un mes en constante crecimiento, dado que las cifras de contagios no solo se han mantenido, sino que han crecido para instalarse en torno a los 200 por parte, este frenazo provocado por las 650 altas comunicadas desde el pasado viernes -el total en los más de dos años y medio de crisis sanitaria asciende ya hasta los 163.232- los deja otra vez más cerca de los 3.000. En concreto, actualmente hay 3.273 personas en la provincia con el Covid-19 latente.

Esta caída de más de 450 cordobeses llega por el balance positivo entre las recuperaciones y los positivos -y también las muertes, que completan la ecuación-, que en los últimos cuatro días han sido 187. Este dato es, de nuevo, cercano a los 200 contagios por balance y sitúa a Córdoba como la segunda provincia andaluza con más afecciones en el reciente fin de semana, solo por detrás de Málaga (193), aunque la diferencia de población es más que evidente. Entre ambas demarcaciones suman cuatro de cada 10 casos en Andalucía.

De esas 187 afecciones, que elevan ya el total hasta las 168.122 (167.584 si se atiende exclusivamente a los resultados obtenidos por pruebas PCR o test de antígenos), el 23% corresponden a personas mayores de 60 años o inmunodeprimidos -el grupo de población considerada vulnerable y foco de estudio desde el mes de abril-, si bien el porcentaje en el último mes se acerca al 70% y hasta lo supera (72,7%) en el parte que ha emitido este martes 18 de octubre la Consejería de Salud y Consumo, que anota 136 en este sector.

Además, el balance deja también dos muertos por las consecuencias derivadas del coronavirus, lo que hace que desde que la pandemia irrumpiera en marzo de 2020 hayan perdido ya la vida 1.617 personas en toda la provincia con esta enfermedad. Un número que siempre dejará la duda de si realmente fue por los efectos directos de la infección o por influencia, de forma negativa, en otro tipo de patologías.

Muchas de estas personas han pasado sus últimas horas en cualquiera de los hospitales de la provincia, que tras un par de semanas de clara subida en cuanto a la presión asistencial, por fin notan un pequeño respiro a pesar de haber anotado 22 ingresos desde el pasado viernes. En estos momentos, en Córdoba hay 46 personas hospitalizadas -la semana pasada se cerró con 50, por lo que hay cuatro menos-, de las que solo una requiere de tratamiento en la Unidad de Cuidados Intensivos por su delicado estado de salud. Eso sí, en Andalucía, solo Sevilla tiene una presión mayor: 54 hospitalizaciones, dos en el área de críticos.