La Hermandad del Rocío de Córdoba tenía que estar ya camino de Almonte (Huelva) para sumarse a la romería de la Blanca Paloma. Sin embargo, el coronavirus, como ha ocurrido con otras muchas celebraciones, lo ha impedido, entre otras cosas porque la junta de gobierno de la Hermandad Matriz de Almonte decidió suspender el pasado 30 de marzo la romería del Rocío, prevista entre el 29 de mayo y el 1 de junio de 2020, debido a la situación generada por la pandemia.

Pero lo que no ha impedido el covid-19 es que algunos de los hermanos de la filial cordobesa hayan llevado flores a la iglesia de San Pablo, templo desde donde tenía que haber partido en la tarde hoy jueves 21 de mayo con el Simpecado hacia la aldea onubense. La filial de Córdoba es la primera que siempre inicia su camino hacia la romería de El Rocio y también la que tiene el camino más largo hasta Almonte.

La no partida se ha llevado a cabo "con dolor pero con fortaleza" y sobre todo "por responsabilidad", atendiendo a las recomendaciones de todas las autoridades y considerando "la máxima prioridad que en estos momentos debe constituir el único motivo de atención y preocupación de todos: la salud", según ya destacaron desde la herrmandad.

No obstante, el Rocío de Córdoba está estos días inmerso en otra lucha contra el civid-19, a favor de los más necesitados. En concreto, en colaboración con el Banco de Alimentos y Cáritas Diocesana, la filial cordobesa elaborará unos 150 menús solidarios en la cocina que se encuentra en la sede social de la corporación rociera, en la calle Rubí, en el polígono del Granadal. Estos menús serán repartidos por estas entidades solidarias, dependiendo de la necesidad de cada zona.