Los profesionales del Hospital Reina Sofía cuentan con nuevas técnicas de cirugía que permiten abordar tumores y otras patologías que afectan al cráneo, a través de unos procedimientos mínimamente invasivos y con navegación quirúrgica, sin necesidad de realizar craneotomías, lo que favorece la recuperación del paciente. La implantación de estas técnicas comenzó en 2016 y, desde entonces, 50 pacientes con afectación a la base del cráneo fueron diagnosticados y tratados en el Reina Sofía por los equipos de Otorrinolaringología y Neurocirugía.

Estas nuevas técnicas las presentó ayer la directora gerente del Reina Sofía, Valle García; el responsable de la Unidad de Gestión Clínica (UGC) de Neurocirugía, Juan Solivera; el director de la unidad de gestión clínica intercentros de Otorrinolaringología, Francisco Muñoz, y el responsable de la sección de Rinología de Otorrinolaringología, Juan Aguilar.

Los profesionales médicos viajaron hasta Ohio para aprender las nuevas técnicas

La directora del centro enumeró las ventajas que supone usar estas nuevas técnicas quirúrgicas. Desde una recuperación más pronta del dolor, una disminución ante las posibilidades de sufrir complicaciones durante la operación o una cirugía menos invasiva que evita cicatrices o incisiones en el rostro. Antes se realizaban operaciones más complejas de cirugía abierta accediendo a la parte dañada desde la parte superior del cráneo; ahora, los profesionales pueden llegar a la zona afectada desde la nariz por vía endoscópica.

El responsable de Neurocirugía del hospital, Juan Solivera, señaló que esto era posible gracias al empleo de técnicas de reconstrucción multicapa con colgajos vascularizados de pericráneo. Esto es, un tejido fibroso que rodea al cráneo; antes de esta tarea se debe haber realizado la extracción (resección) del tumor en cuestión.

Estas técnicas necesitan un gran nivel de especialización e implicación por parte de los profesionales. Por eso, la directora, Valle García, aprovechó su turno para felicitar a los médicos presentes. "La incorporación de las novedades asistenciales que se producen en los diferentes campos de la medicina no sólo tiene que ver con la tecnología que adquirimos, sino también con la implicación y capacidad de esfuerzo, compromiso y superación de nuestro profesionales. Tenemos mucha suerte de contar con equipos implicados en la salud de nuestros pacientes y en mantener a nuestro hospital como referencia nacional", dijo.

Para llevar a cabo esta tarea ha sido necesaria una cooperación entre ambas unidades, Otorrinolaringología y Neurocirugía. El responsable de esta primera destacó la importancia de incluir estas técnicas en los servicios del Reina Sofía. "Se permite trabajar en red, en equipos multidisciplinares, con las aportaciones de las diferentes disciplinas", dijo. Esto es posible gracias al trabajo con la red de centros de la provincia, que permite que el paciente sea derivado y atendido en el centro más indicado, acorde a sus necesidades asistenciales. Así, el hospital Infanta Margarita de Cabra tiene el mismo equipo que el Reina Sofía.

Para poder desarrollar estas técnicas en el hospital cordobés, ha sido necesaria una preparación y formación previa por parte de los profesionales. Estos se trasladaron a Columbus (Ohio), al Hospital Oncológico The James, de la Universidad Estatal de Ohio, donde durante seis semanas pudieron conocer de primera mano este tipo de técnicas de mano de profesionales reconocidos a nivel mundial.

Gracias a esta formación, según señaló el responsable de Neurocirugía, "podemos realizar resecciones más grandes por vía endoscópica, optimizando la visibilidad y mejorando el resultado en caso de necesitar un tratamiento con radioterapia posterior". En esta línea, Solivera indicó que "el objetivo es seguir sumando experiencia para convertirnos en centro referencia nacional de este tipo de intervenciones". Por último, Muñoz destacó que esta forma de proceder permite mejorar los resultados de patologías que se ubican en la zona basal del cráneo.