Un grupo de mayores del centro de día municipal de la zona de Levante ha pedido la dimisión de la teniente de alcalde de Igualdad y Bienestar Social, Ana Moreno, por las "deficiencias" que presentan las instalaciones. Según refleja la denuncia, firmada por el vocal de la junta de gobierno de este centro Miguel García, los usuarios del edificio critican el "abandono total y absoluto" que sufren algunos de sus servicios, como es el caso del bar-cafetería. El informe presentado en el Ayuntamiento también alude a unas presuntas irregularidades en los aseos del centro, así como a la falta de higiene y limpieza en general.

La situación actual del bar-cafetería es, sin embargo, el eje principal de las críticas de los mayores. El documento arroja en este sentido que estas dependencias llevan cerradas desde el pasado marzo y habla incluso de un "posible hurto y expoliación" de su mobiliario y de los productos que quedaban allí. La limpieza es otro de los aspectos que los usuarios ponen en entredicho. El responsable de la junta de gobierno del centro señala a este respecto que "la falta de ventilación de los servicios de caballeros lleva al esparcimiento de los malos olores en todo el edificio".

Los usuarios del centro de mayores denuncian también a través de este mismo escrito que el edificio carece de un plan de evacuación y de emergencia específico y lo hacen extensivo al resto de centros de mayores que hay en la capital. Añaden, por último, que Moreno "ha sido incapaz de normalizar la situación en todos los centros municipales de día de mayores y en todos los centros sociales comunitarios, ya que estos últimos siguen careciendo de un reglamento de régimen interior, entre otras cosas".

Las fuentes del Ayuntamiento a las accedió El Día negaron, sin embargo, las irregularidades denunciadas e incluso puntualizaron cada uno de los aspectos criticados por los usuarios del edificio de Levante. En relación a la limpieza, desde el Consistorio informaron que "Sadeco pasa a diario" por el centro. También precisaron que el Gobierno local invirtió en torno a 12.000 euros para renovar el mobiliario de las instalaciones y que los aseos "se adaptaron en 2007". En cuanto al funcionamiento del bar-cafetería, justificaron el cierre al apuntar que el concurso de adjudicación quedó desierto al considerar los empresarios que el negocio no era rentable. En cualquier caso, puntualizaron que la explotación del servicio de restauración "sigue pendiente" de un adjudicatario.