El secretario provincial del Partido Comunista de Andalucía (PCA), José Manuel Mariscal, ha sido el primero en dar ejemplo en su formación y este año se ha declarado objetor fiscal a los gastos militares. Su comportamiento responde a la campaña que ha puesto en marcha el PCA de desobediencia civil a los gastos militares en la que solicitan que todas las personas detraigan el coste de esta partida hacia otras necesidades de carácter social.

Mariscal ya lo ha hecho y ayer explicó que para ello ha detraído de su declaración el 12,04%, que representa el coste establecido en los Presupuestos Generales del Estado dedicados al ámbito militar. En total, el secretario provincial del PCA destinará 79,06 euros, de los que 656,92 que tiene que pagar a Hacienda y que destinará a un proyecto de cooperación en Palestina. Aunque reconoció que esta práctica es ilegal, Mariscal aseguró también que prefiere "apostar el dinero a la cooperación internacional, que destinar esos casi 80 euros a la militarización de la sociedad española y mantener la guerra como elemento indispensable de sus relaciones internacionales". "Cometo una falta de forma consciente y en eso consiste la desobediencia civil", indicó.

Según los análisis de la campaña Por la paz, no a la investigación militar, el 12% de todo el Presupuesto General del Estado de 2007 se destinó a la maquinaria militar, policial y armamentística, lo que supuso 23.052 millones de euros, 63 millones de euros diarios, un 5,7 % más que el pasado año anterior, y menos que en 2008. Mariscal detalló que esta cantidad representa, comparada con las cuentas de otros ministerios para el presente ejercicio, hasta siete veces más que para Industria y Energía, 13 veces más que Agricultura, 18 veces más que para Vivienda, 32 veces más que para Cultura y 26 veces más que para Sanidad.