movilización contra el plan de ajuste El PSOE secunda la marcha pese a que también se criticó a la Junta

Miles de personas salen a la calle para protestar contra los recortes

  • Los sindicatos calculan una afluencia de más de 25.000 personas y aseguran que es el momento de ir otra vez a la huelga general · CSIF, CEP, SUP o el Siplb se unen en esta ocasión a las protestas

Enfermeros, maestros, bomberos, policías, médicos, carteros, policías, jubilados, parados... Todos salieron a la calle ayer con su familia, con sus amigos o con sus compañeros de trabajo para protestar contra los últimos recortes del Gobierno de Mariano Rajoy en una de las manifestaciones más multitudinarias celebradas desde que comenzó la crisis económica. Los datos, como siempre, bailan entre las 25.000 personas de los sindicatos y los 15.000 de la Policía, pero lo cierto es que fue mucha la gente que ayer participó en la manifestación y los impulsores incluso llegaron a afirmar que se superó la participación de la concentración de la huelga general el pasado mes de marzo. Por primera vez, la mayoría de sindicatos se unieron en el mismo recorrido y además de los organizadores, CCOO y UGT, se sumaron otros como el CSIF, la Confederación Española de Policía (CEP) y el Sindicato Unificado de Policía (SUP), el Sindicato Independiente de Policía Local y Bomberos (Siplb) o el Sindicato de Enfermería Satse. Los bomberos fueron uno de los colectivos más aclamados a su llega por el mensaje que llevaban en su pancarta: "Rescatamos a personas, no a los bancos". También se pudo ver a personal de la Universidad de Córdoba, a maestros defendiendo "una educación pública de todos y para todos" y a partidos políticos como Equo -que solicitaba un referéndum- o Izquierda Unida. Los del PSOE quisieron hacerse más visibles en la cabeza de la manifestación y allí se pudo a ver al secretario general de los socialistas de Córdoba, Juan Pablo Durán; el delegado de Agricultura, Francisco Zurera o el diputado Antonio Hurtado, entre otros. A la exalcaldesa y exministra Rosa Aguilar también se la pudo ver durante el recorrido.

Los trabajadores del Instituto Municipal de Deportes (Imdeco) también estuvieron en la protestas portando una pancarta contra los despidos, al igual que otros empleados municipales del Instituto de Desarrollo Económico y Empleo (Imdeec) o de la Gerencia de Urbanismo. Todas las banderas y mensajes de todos los colectivos se unieron en un sólo grupo de gente que mostraba su rechazo hacia la política económica del Gobierno. "No te calles, defiende tus derechos. Nos quieren llevar a la ruina" era el lema de la protesta, pero muchos manifestantes llevaron sus propios mensajes. "El próximo parado, que sea un diputado" o "si no hay dinero que lo devuelvan los políticos, banqueros y empresarios corruptos", fueron algunas de la frases plasmadas en carteles. Las consignas cantadas se centraron la mayoría contra el Gobierno del PP.

La manifestación salió a las 20:30 de la glorieta de las Tres Culturas y 40 minutos después todavía quedaba gente en el inicio. Sobre las 21:45 la cabeza llegó a la Subdelegación del Gobierno y entonces llegaron las intervenciones de los secretarios generales de CCOO y UGT, así como el representante de la Plataforma de Colectivos Sociales, José Rojas. Éste último defendió la importancia de mantener las políticas sociales y criticó el recorte en la ley de la dependencia y apeló a la unidad de los ciudadanos para poner freno a las medida que "perjudican a los más débiles". El secretario general de UGT de Córdoba, Antonio Fernández, recordó lo "duras" que han sido las últimas medidas aprobadas por el Gobierno central, como la subida del IVA o la reducción de la prestación a los parados y se preguntó "¿hasta dónde quieren llegar con su mayoría absoluta". Fernández también destacó que "cada vez hay más conciencia ciudadana" y agradeció a todos los participantes en la protesta porque " se han superado las cifras de la huelga". También tuvo un recuerdo a los mineros, los "héroes de la lucha obrera" a los que puso como ejemplo para frenar al PP.

El secretario provincial de UGT avisó también a la Junta de Andalucía y dijo que la administración autonómica "no puede estar a las imposiciones del Gobierno central". "Se equivoca", continuó Fernández, "y tendrá nuestro rechazo frontal sea del color que sea". Su homólogo en CCOO, Rafael Rodríguez, también se dirigió a la Junta y dijo que "no se esconda tras el Gobierno" para justificar sus medidas. Rodríguez también criticó a Rajoy por seguir escudándose "en la herencia recibida" y al alcalde, José Antonio Nieto, por los posibles despidos que puede haber en algunos organismos públicos como el Imdeec o el Imdeco. Éstos últimos están encerrados en el Palacio de Deportes Vistalegre como medida de presión por su situación laboral y ayer también participaron en la protesta junto a otros empleados de otras empresas municipales.

Los sindicatos llamaron a la huelga general porque "no podemos esperar más, tenemos que ir a por medidas más contundentes", según apuntó Fernández. CCOO y UGT se habían planteado la manifestación de ayer como una oportunidad para tomar el pulso de la ciudadanía y valorar si la respuesta era suficiente para plantear el paro total. El propio CISF -sindicato de funcionarios- ya ha anunciado una huelga para el próximo mes de septiembre y ha pedido a los generalistas que se sumen. Tanto Fernández como Rodríguez aseguraron que las manifestaciones habían sido un éxito en toda España, destacando el caso concreto de Oviedo donde participaron 100.000 personas. Con esta respuesta, lo más probable es que las centrales de los sindicatos se reúnan en los próximos días para decidir si convocan el paro. En ese caso sería el segundo durante el Gobierno de Mariano Rajoy, que sólo lleva en el poder siete meses. El primero se produjo el pasado mes de marzo y en Córdoba no consiguió paralizar la actividad porque la mayoría de comercios y empresas abrió. Donde sí hubo una respuesta contundente fue en la manifestación que se celebró al mediodía, que consiguió atraer también a miles de personas. Desde entonces, los recortes han continuado y el nivel de protestas de los sindicatos y de los ciudadanos también se está elevando.

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