Córdoba

Miles de cordobeses se suman a la protesta contra la reforma laboral

  • UGT y CCOO calculan que unas 20.000 personas participaron en la manifestación, que concluyó en la Subdelegación con la lectura de un manifiesto de rechazo a los cambios aprobados por el Gobierno de Rajoy.

Miles de personas se lanzaron ayer a la calle para participar en la manifestación convocada por UGT y CCOO para protestar contra la Reforma Laboral aprobada por el Gobierno.  Durante más de dos horas, los participantes recorrieron en Centro de la ciudad  clamando su rechazo a un cambio "injusto, ineficaz e inútil", tal y como se podía leer en la pancarta que encabezaba la marcha en medio de un mar de banderolas de los sindicatos convocantes y algunas banderas republicanas.

CCOO y UGT mostraron su satisfacción ante la respuesta de la ciudadanía a esta convocatoria que marcará el inicio de una serie de movilizaciones "en oleada", sin descartar una huelga general. En un primer momento los sindicatos elevaron a 12.000 el número de participantes en la movilización, aunque finalmente aseguraron que la cifra total fue de 20.000 personas, uno de los índices de participación más elevado de Andalucía. No obstante, tanto la Policía Local como la Policía Nacional calcularon que la cifra de participación fue de entre 5.000 y 7.000 personas.

La manifestación partió a las 11:00 de la plaza de las Tres Culturas, desde la Fuente de las Batallas, hasta la Subdelegación del Gobierno. En el punto de salida de la marcha el secretario general de UGT en Córdoba, Antonio Fernández, insistió en que la reforma laboral aprobada hace tan sólo dos semanas por el Gobierno de Mariano Rajoy "no cuenta con el apoyo de una gran mayoría de la ciudadanía", por lo que, según sus palabras, "es el momento de salir a la calle para luchar, ya que es un momento clave para el mundo del trabajo y para toda la población". Esta protesta, para Fernández, se convertirá en el comienzo de un programa de movilizaciones para informar y concienciar del "grave perjuicio que supone este cambio a la clase obrera española".

El secretario general de CCOO en Córdoba, Rafael Rodríguez, por su parte, recalcó que esta protesta "es una muestra de que los cordobeses están diciendo no a la reforma laboral". No obstante, y a pesar del amplio apoyo obtenido en la convocatoria sindical, Rodríguez se mostró cauto, puesto que, según su opinión, "ésta es una carrera de fondo, por lo que tenemos que guardar fuerzas porque más adelante las agresiones van a ser mayores y son las manifestaciones las que han propiciado que no se pierdan más empleos y que han propiciado que hayan derechos sociales". Por último, Rodríguez quiso lanzar un mensaje al Gobierno liderado por el Partido Popular para criticar la actitud adoptada en sus primeros meses de mandato, ya que "la mayoría absoluta no significa que puedan cometer un atropello a los derechos laborales porque esto supone eliminar los derechos sociales del conjunto de la ciudadanía".

Los dos líderes sindicales además recalcaron que la reforma supondrá una nueva sangría en la cifra de parados de la provincia y, por lo tanto, se traducirá en una "mayor precariedad". En este sentido, insistieron en que los empresarios podrán cambiar las condiciones de trabajo " y si el trabajador no está de acuerdo se va a la calle con 20 días por año y con nueve meses como máximo".

La convocatoria de CCOO y UGT también estuvo apoyada por otras organizaciones sindicales como CNT. Su secretario general en Córdoba, Francisco Moro, valoró la importancia que en estos momentos cobran este tipo de movilizaciones y puso como ejemplo la situación que en estos momentos está sufriendo la plantilla de Laboratorios Pérez Giménez. "La empresa ha despedido a 15 trabajadores más, pero se va a presentar el lunes una denuncia ante el Juzgado de lo Social".

Algunos representantes políticos de PSOE e IU también quisieron unirse a la movilización. Junto a los líderes sindicales se encontraba el secretario provincial de los socialistas en Córdoba, Juan Pablo Durán, quien insistió en que "esta reforma laboral no es la que necesita España en estos momentos, ya que nos ha retrotraído 30 años atrás". Según su opinión, la mejor definición de este nuevo cambio aprobado por el Gobierno la dio ayer el secretario general del partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien la tildó como "una fórmula para despedir barato a los padres y contratar en precario a los hijos". Durán, que estuvo acompañado por la vicesecretaria general de Política Institucional del PSOE de Córdoba, Soledad Pérez, detalló además que su partido apoyará a los sindicatos "para que se cambie el rumbo hacia una política para generar empleo".

El grupo de IU estuvo encabezado en la manifestación por su recién nombrado coordinador provincial, Pedro García, quien también mostró su apoyo a las fuerzas sindicales en su nueva etapa política. "Hay que ponerse a trabajar para empezar a funcionar y a escuchar lo que está pasando en la calle", señaló García. A su lado se encontraba la cabeza de lista de IU a las elecciones autonómicas, Alba Doblas, que aseguró que "en estos momentos el partido debe estar con los trabajadores en la lucha frente a esta agresión de la empresa y del Gobierno". La protesta concluyó a las puertas de la Sudelegación con el discurso de los líderes sindicales y la lectura de un manifiesto por parte de la Plataforma de Organizaciones Sociales de Córdoba, que denunció que la crisis económica que sufre el país "no puede ser una excusa para recortar los derechos sociales.

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