El paso a nivel de la barriada periférica de Alcolea fue el triste escenario donde J. O. R. falleció ayer tras ser atropellado por un tren de mercancías. La víctima, de 62 años, vivía en el barrio del Guadalquivir y, según la delegada de la alcaldesa en Alcolea, Isabel Sereno, "estaba separado y no tenía contacto con su familia". Los residentes de la zona lo conocían porque iba a la barriada a recoger los espárragos e higos chumbos que luego vendía en la plaza de la Mosca.

Los hechos sucedieron sobre las 15.30, después de que el fallecido almorzara en uno de los bares de Alcolea y se dispusiera, como cada día, a recorrer el campo. Así, cogió su bicicleta, con la que se desplazaba de un sitio a otro, y se dispuso a cruzar las vías ferroviarias que parten esta barriada periférica en dos. Según uno de los testigos presenciales del suceso, "parece que se cansó de esperar a que se levantara la barrera que estaba echada" y cruzó en el momento en el que pasaba el tren.

Antes del siniestro, un autobús de Aucorsa pasaba cerca y la conductora alertó a la víctima de la temeridad que estaba a punto de cometer. Pero J. O. R. no escuchó tampoco las llamadas de atención que llegaban desde el autobús y fue atropellado. Tras el siniestro la chófer tuvo que ser atendida por los servicios médicos desplazados hasta el lugar de los hechos por una crisis de ansiedad. Los pasajeros de la línea E fueron recogidos posteriormente por otro vehículo para continuar con su recorrido hacia el casco urbano de la capital.

El delegado municipal de Seguridad y Movilidad, José Joaquín Cuadra, indicó que J.O.R. no llegó a recibir asistencia médica porque "murió en el acto". Tras el impacto, el cuerpo del fallecido sufrió la amputación de una pierna, por lo que los vecinos que acudieron al lugar de los hechos alertados por el siniestro sufrieron una gran conmoción, apuntó la delegada de la alcaldesa en Alcolea.

Este suceso no ha hecho más que encender los ánimos de los vecinos de Alcolea que ayer pedían más que nunca que las vías férreas de esta zona se trasladaran o se soterraran. A este respecto, Sereno señaló que "la solución para terminar con el problema es desplazar las vías, porque soterrar el paso a nivel no evita que las vías sigan estando". Este problema lo viven a diario los habitantes de Alcolea que tienen que cruzar por este punto para ir, por ejemplo, al Instituto de Educación Secundaria.

Así, el enfado entre los vecinos era palpable en cada rincón del barrio tras propagarse la noticia por esta barriada. Y es que "podíamos haber sido cualquiera", señaló la delegada de la alcaldesa en Alcolea, quien avanzó que esta tarde a las 19.00 se producirá una manifestación de los vecinos para pedir que se retire el paso a nivel.