La teniente de alcalde de Hacienda, Alba Doblas, devolvió ayer al PP el discurso sobre la "radicalidad" que han adoptado los populares contra las políticas de izquierdas y aseguró que es precisamente el grupo del PP en el Ayuntamiento el que "está en la radicalidad ideológica" pues se está situando "en la extrema derecha y el fascismo" con sus críticas sobre el programa de patios de la Axerquía. Doblas se mostró muy crítica con la versión que hizo el concejal del PP Luis Martín del proyecto, quien criticó que la propuesta de ceder las casas patio a cooperativas y ceder espacios a colectivos sociales como los refugiados. En este sentido, la edil de IU lamentó que "sitúe el discurso xenófobo" como prioritario al afirmar que "antes los españoles que los refugiados", puesto que se trata de ideas "de extrema derecha". Doblas explicó que la propia convocatoria de fondos europeos -a la que se ha presentado el proyecto para optar a cinco millones de euros de financiación- exigen propuestas que den respuesta "al problema de los refugidados" y aseguró que la Unión Europea "no es nada sospechosa de ser chavista". La presidenta de Vimcorsa se mostró muy crítica con el PP y aseguró que "su política de vivienda no existe". Además lamentó que los populares hayan trasladado que se pueda poner en riesgo el modelo de convivencia en los Patios ya que, según su opinión, "lo que pone en riesgo esta fiesta es no haber previsto el relevo generacional", entre otras cuestiones. Doblas defendió su proyecto y pidió al PP "que formule una disculpa a la ciudadanía". Sobre la falta de información a los vecinos, la edil de IU insistió en que ya se presentó a los colectivos, aunque se seguirá trabajando para incorporar sus propuestas.

El portavoz del PP, José María Bellido, insistió ayer en que su grupo "no respalda" los planteamientos del proyecto porque "rompe con el modelo de convivencia" y tiene "una ideología muy marcada". Así, insistió en que "ni compartimos ni lo respaldamos salvo que se rectifique". El programa que el Ayuntamiento propone comprará los espacios que estén abandonados o muy deteriorados para, una vez que ya sean de dominio público, cederlos a cooperativas para que se hagan cargo de su rehabilitación. El gobierno municipal cederá estos inmuebles a los adjudicatarios por un periodo largo de tiempo a cambio de un canon que se fijará en términos de alquiler social.