Las actuaciones del Ayuntamiento para acabar o evitar la mendicidad infantil que realizan algunos de los rumanos que residen en la capital no están dando resultado. La responsable de Bienestar Social del Consistorio, Ana Moreno, aseguró hace unos días que durante la campaña de Navidad -del 20 de diciembre al 5 de enero- se iba a intensificar la presencia policial, así como el control sobre estas personas que utilizan a bebés para pedir dinero. Sin embargo, en los últimos días, los ciudadanos de Europa del Este fincados en Córdoba han intensificado su actividad en calles como Cruz Conde, Gondomar o Concepción, aprovechando la actividad de los comerciantes y también de las personas que se desplazan a estas zonas estos días para hacer las compras de Navidad.

Según ha podido comprobar este periódico, la presencia de rumanos con niños en brazos pidiendo limosna no ha cesado en los últimos días, a pesar de la intención inicial del Consistorio. Otra de las medidas que propusieron fue la de promocionar un teléfono de la mendicidad al que los ciudadanos deben llamar si ven alguna escena de este tipo.

Los comerciantes de la zona han demandado más seguridad ante la mayor presencia de extranjeros que acuden a las zonas de las tiendas para pedir limosna, que es su principal medio de vida. De hecho, algunos comercios han colgado carteles reclamando a los clientes que no den dinero a estas personas, lo que ha provocado una fuerte crítica por parte de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDH).

El Consistorio mantiene el plan contra la mendicidad infantil de forma permanente, aunque se intensifica en esta época. Uno de los principales objetivos planteados también en este proyecto de intervención es promover el aprendizaje de habilidades básicas para el cuidado de los menores a través de talleres socieducativos impartidos en el Servicio de Estancia Diurna Infantil. Con estos cursos se intenta concienciar a estas mujeres que mendigan con sus hijos de la necesidad de tenerlos bien atendidos.