María Sevillano Guerrero con 29 años rompe con el perfil medio del autónomo en la provincia. Es mujer, joven y no se dedica a la hostelería. Como salida a la búsqueda infructuosa de empleo decidió crear Ahys, una asesoría de higiene y Seguridad Alimentaria dedicada a la elaboración de los sistemas de autocontrol y demás documentación que exige Sanidad a las industrias alimentarias y a los establecimientos hosteleros a la toma de muestras alimentarias para su posterior análisis en laboratorio, a actividades de formación de manipuladores de alimentos, y a la distribución de productos de limpieza industriales y celulosa industrial, además de llevar la representación de una importante marca de cocinas industriales.

La empresa, situada en Tomares, comenzó a funcionar en febrero y nació como respuesta a que una empresa de la competencia le propuso trabajar en ella como autónoma. "Pensé que mejor que para ellos, trabajaba para mí misma. Hasta ahora no me arrepiento de lo decidido", explica.

Esta joven estudió Laboratorio Alimentario y nunca pudo trabajar como tal, por lo que ahora está empleada en aquello para lo que estudió. "Además, en mi casa no hago nada. Ser empresaria autónoma es difícil, pero animo a todos a que se aventuren. Para los autónomos hay pocas ventaja, pero cada vez somos más porque es una de las maneras de enconrar trabajo", asegura.

En cuanto a la creación de nuevas empresas, apuesta por la originalidad. "No se pueden crear siempre bares y comercios, hay que buscar nuevas salidas profesionales", comenta.

Lo que no deja de recalcar es la importancia del apoyo de la familia. "Hay veces que te vienes abajo y ncesitas saber que cuentas con los demás", confiensa.