Carlos ocaña, secr. estado hacienda y presupuestos

"Tenemos los mimbres para que la situación económica no sea más que un catarro"

  • Ocaña anuncia que el Gobierno rebajará su previsión de crecimiento para 2009, descarta una recesión y augura la recuperación a partir del segundo semestre del próximo año

El secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, se mostró convencido ayer de que la economía española cuenta con los "mimbres" necesarios para salir airosa de la desaceleración que actualmente padece y evitar que esa situación derive en algo más grave que un "catarro". Ocaña, que hizo estas declaraciones durante una conferencia pronunciada en el Foro Joly, reconoció que para sacar el máximo jugo a esos mimbres y buscar soluciones adecuadas a la coyuntura por la que atraviesa el país, es necesario asumir antes el entorno al que se hace frente. En este sentido, reconoció que "hay que remontarse muchas décadas atrás para encontrar un escenario económico tan malo como el de hoy", y anunció que el Gobierno rebajará en las próximas semanas su previsión de crecimiento para 2009 (inicialmente, fijada en el 2,3%). No obstante, descartó que España vaya a entrar en una recesión y apuntó que podría empezar a levantar cabeza a partir del segundo semestre de ese mismo ejercicio.

En su "descarnado" diagnóstico de la coyuntura, el responsable de Hacienda y Presupuestos repasó las circunstancias que han dado al traste con "tres lustros de expansión". Entre ellas, destacó factores externos, como el precio del petróleo -se ha cuadruplicado desde 2003- o los obstáculos que la crisis subprime ha generado en el acceso a financiación, y factores internos, como el "severo" ajuste del sector inmobiliario. "El resultado de todo esto es que tenemos una inflación alta, menor crecimiento y tipos de interés algo más elevados, lo que, a su vez, ha incidido en el consumo, la inversión y, sobre todo, la confianza", añadió. Pese a esta negativa radiografía, subrayó que habría que ser "relativamente optimistas" a medio plazo. Como justificación fundamental esgrimió que España parte de una situación bastante mejor que la que presentaba en la crisis de principios de los 90, gracias a "la combinación de una política económica sensata y unos sólidos fundamentos empresariales".

A este respecto, indicó que ahora el sector público está "muy saneado" -el peso del endeudamiento sobre el PIB se ha reducido 11 puntos en cuatro años y las cuentas del Estado han pasado de ser deficitarias a arrojar superávit-; el tejido productivo es "incomparablemente más fuerte" (tiene multinacionales, una cuota de mercado sostenida en exportaciones y capacidad para atraer inversión extranjera); y el Ejecutivo ha reforzado su apuesta por medidas "cruciales". En relación con esas medidas, resaltó, por un lado, el hecho de que los presupuestos de 2009 serán "excepcionalmente austeros" y, por otro, los esfuerzos que se están realizando para cambiar el modelo productivo, potenciando los sectores de alto valor añadido, mediante la inversión en infraestructuras y capital humano y tecnológico.

Carlos Ocaña recalcó el deseo del Gobierno de que España "dependa menos del sector inmobiliario, porque eso es lo que nos ha hecho vulnerables". "Queremos una economía más diversificada, pero también queremos que la transición sea lo más suave posible; de ahí que estemos respaldando al sector inmobiliario con iniciativas como el impulso a la VPO o las facilidades fiscales para la rehabilitación de viviendas".

Junto a todo ello, puso de relieve los tres paquetes de medidas que el Ejecutivo ha lanzado en sus cien primeros días de gobierno para "ayudar a los ciudadanos y paliar la falta de liquidez de las empresas". Así, se refirió a los 6.000 millones de euros que generará la reducción del IRPF; la modificación del IVA; una inyección de 8.000 millones al sistema; la eliminación del Impuesto de Patrimonio; el diseño de un plan para reducir las cargas administrativas a las empresas; la modificación del funcionamiento de sectores como el eléctrico; o la privatización parcial propuesta para AENA (el gestor de los aeropuertos españoles).

Preguntado por si no consideraba un "despilfarro" la liberación de esos 6.000 millones del IRPF y si no hubiera sido mejor reservarlos para, por ejemplo, dinamizar la actividad de las compañías, Ocaña respondió que, además de que a los "contribuyentes no les ha parecido mal", se trata de una respuesta a "la situación económica que vivimos", cuyo objetivo no es otro que fomentar el consumo. Asimismo, indicó que este tipo de propuestas ya han sido aplicadas en países como Estados Unidos para aliviar coyunturas similares a la que atraviesa España .

En cuanto a la posibilidad de que, también como incentivo, se rebajen los impuestos de los carburantes -el presidente francés, Nicolás Sarkozy, se ha manifestado en varias ocasiones a favor de esa iniciativa-, el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos explicó que "cualquier estímulo que se le dé al consumo de petróleo se traducirá en un empobrecimiento de la economía y de la propia población, por lo que no tiene sentido hacerlo". "Nuestra intención no es tocar los impuestos; ni bajarlos, si subirlos, como han hecho otros países vecinos", añadió.

Por último, Carlos Ocaña abordó las deslocalizaciones empresariales que vienen dándose de un tiempo a esta parte -según un informe de Funcas, desde 2000 se han producido más de 450 operaciones, que han afectado a unos 85.000 trabajadores- y apuntó que "es normal que a medida que una economía vaya madurando, haya compañías que salgan y otras que entren". En este sentido, recordó que el crecimiento de España entre las décadas de los 70 y los 80 se sustentó, precisamente, en la llegada de firmas que habían abandonado otros países. "Es verdad que hay deslocalizaciones y, sobre todo, en sectores intensivos en mano de obra, como el textil, pero se está gestionando razonablemente bien".

En definitiva, el panorama para lo que queda del ejercicio 2008 se presenta, en su opinión, "mal". En cualquier caso, insistió en que, "si no se produce ningún nuevo shock, en la segunda mitad de 2009 deberíamos estar repuntando".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios