La Guardia Civil ha detenido este viernes en Málaga al exmilitar que había sido identificado como presunto autor de los disparos a fotos de miembros del Gobierno, entre otras del propio presidente, Pedro Sánchez, y el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, según han confirmado fuentes del Instituto Armado. El arrestado se encuentra en dependencias de la Comandancia de Málaga.

Este individuo fue grabado en vídeo mientras disparaba en una galería de tiro de Málaga capital perteneciente a una armería deportiva. Las imágenes fueron posteriormente subidas a redes sociales y retuiteadas y compartidas por por miles de personas.

La Policía Nacional había identificado al autor de los disparos, remitiendo las indagaciones a la Fiscalía. Fuentes de este Cuerpo habían adelantado que se trataba de un taxista y que se indagaba por su presunta relación con movimientos de extrema derecha.

En el vídeo, el hombre, provisto de unos cascos rojos y a cara descubierta, levanta un dedo en señal de burla cuando acaba de disparar y después la cámara muestra las imágenes de los políticos de la diana antes de ser abatidos: la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias; los ministros Irene Montero y Fernando Grande-Marlaska, y el dirigente de Podemos Pablo Echenique.

Las primeras investigaciones iniciadas el jueves determinaron que el arma empleada no pertenecía a las de la dotación reglamentaria de las fuerzas de seguridad ni tampoco que la galería de tiro fuera una de las dependencias policiales de las que disponen los agentes para hacer sus prácticas de tiro obligatorias.

Tras estas comprobaciones, las pesquisas de la Policía Nacional también concluyeron a última hora del jueves que el lugar donde se habían grabado estas imágenes era una galería de tiro privada situada en Málaga capital perteneciente a una armería deportiva, según han indicado este viernes fuentes de la investigación.

Por su parte, fuentes del Gobierno confirmaron que la Abogacía del Estado presentaría una denuncia ante la Fiscalía para tratar de esclarecer los hechos e identificar a los autores del vídeo.

"Hechos así alimentan a los sectores más ultras de la sociedad que pretenden destruir valores esenciales de nuestra democracia y de nuestra Constitución, como son la convivencia y el respeto absoluto de la pluralidad política", aseguraron desde el Ejecutivo.