Un joven de 19 años ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Málaga a siete años de prisión por agredir sexualmente a la sobrina de su compañera sentimental, que entonces tenía 11 años.

El tribunal considera probado que el procesado, S.L.S., propuso el 27 de junio de 2007 a la víctima que le acompañara a la ferretería para cambiar el cristal roto de una ventana que pretendía arreglar, y tras estacionar el vehículo en un aparcamiento, reclinó el asiento en el que viajaba la menor, le tocó sus genitales y le pidió que se tumbase encima de él.

Al regresar al domicilio de la menor, la arrojó sobre la cama, la volvió a tocar y besar al tiempo que le invitaba a mantener relaciones sexuales, pese a que ella le pedía que le dejase en paz, y le dijo que no se lo contara a su madre.

En los fundamentos de derecho se señala que el testimonio de la víctima es "sumamente verosímil" y está corroborado por el testimonio de su abuela en lo que se refiere a la secuencia del arreglo de la ventana y a la posibilidad que tuvo el acusado de realizar los hechos enjuiciados.

La Sala condena al joven a siete años de prisión como responsable de un delito de agresión sexual y a que indemnice a la víctima en 12.000 euros, y le prohíbe aproximarse a ella o comunicarse con ésta durante ocho años.