Finanzas

Los abejorros polinizadores comerciales, posible ‘amenaza’ para los autóctonos

  • Un estudio de Doñana-CSIC y UAL confirma que pasan del invernadero al hábitat local

Investigadores de la Estación Biológica de Doñana-CSIC y UAL determinan que los insectos comerciales se ven favorecidos.

Investigadores de la Estación Biológica de Doñana-CSIC y UAL determinan que los insectos comerciales se ven favorecidos.

En Almería, casi cada día salen a la luz nuevos avances fruto de la investigación y el desarrollo, gracias a profesionales de centros propios de la administración, privados, pero también ha ganado un gran peso específico en los últimos años su Universidad. Y como no, buena parte de esos esfuerzos se centran en hacer avanzar el principal motor económico de la provincia, la agricultura.

En este caso, han sido investigadores de la Estación Biológica de Doñana-CSIC y la Universidad de Almería quienes han confirmado que los insectos comerciales se desplazan hacia los espacios naturales, en un primer estudio sobre el comportamiento de estas especies en los campos de fresa de Huelva. Sus conclusiones verifican que los foráneos incrementan su área de acción y comparten con los autóctonos el hábitat adyacente.

El uso de colonias podría provocar un desequilibrio en el ecosistema

En el trabajo, los científicos comprobaron diferentes patrones en su conducta y en la manera en que se relacionan con el entorno y con los abejorros locales. En el artículo ‘Contrasting occurrence patterns of managed and native bumblebees in natural habitats across a greenhouse landscape gradient’ publicado en la revista Agriculture, Ecosystems & Environment los expertos establecen esta lista de modelos observados, con los que pretenden sentar las bases para estudios posteriores que determinen el peligro de competencia entre las distintas subespecies.

Uno de los datos confirmados es que parte de los abejorros usados para polinizar cultivos de frutos rojos se mueven hacia los pinares para alimentarse del néctar y polen de las plantas silvestres, base de la alimentación de las especies autóctonas. “Hemos confirmado que en lugares con muchos invernaderos, los insectos comerciales están más presentes. En cambio, la presencia de los nativos desciende. Debemos seguir estudiando qué implicaciones ecológicas pueden tener estos patrones para la fauna y flora local”, indica a la Fundación Descubre el investigador de la Estación Biológica Doñana Alejandro Trillo, autor del artículo.

El estudio ha incluido también la observación en las dos estaciones principales en las que se cultivan los frutos rojos. En invierno, cuando las fresas comienzan a florecer y se empiezan a emplear colonias, la densidad de los comerciales en los pinares es mayor que la de los nativos. En primavera, a pesar de que el uso de abejorros introducidos desciende, estos siguen estando presentes en las áreas adyacentes, probablemente atraídos por una mayor disponibilidad floral. Tanto foráneos como autóctonos se alimentaron de plantas similares.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios