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Un recorrido por el futuro

  • El centro Manuel Losada Villasante abre sus puertas como referente en la investigación biomédica y con un instrumental pionero en España

Austero por fuera e innovador por dentro. Quien visite el nuevo centro universitario Manuel Losada Villasante, situado a escasos metros del Hospital Virgen del Rocío, se encontrará con un edificio de diseño sobrio pero con los más modernos utensilios para la investigación biomédica, hasta el punto de que puede considerarse como pionero en dicha especialidad. El principal objetivo de los científicos que en él trabajen será constatar las estructuras neuronales de los animales.

Este centro quedó inaugurado este martes en un acto al que acudió el consejero de Economía y Conocimiento, Antonio Ramírez de Arellano; el rector de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro; y los familiares de Manuel Losada Villasante, al que está dedicado el edificio. Levantado sobre un solar cedido por el Ayuntamiento, cuenta con una superficie de 4.000 metros cuadrados. En su puesta en funcionamiento se han invertido 10 millones de euros, de los cuales, 7,5 millones se han empleado en la construcción y otros 2,5 en equipamiento. Dicho gasto ha sido posible gracias a los fondos europeos recibidos a través del Ministerio de Economía e Industria y de la Junta de Andalucía.

Su diseño responde a una concepción netamente funcional: de líneas sobrias, sin decoración alguna. Lo más importante se encuentra dentro, tanto en el personal que en él trabajará -los investigadores de la Hispalense- como en el instrumental puesto a su disposición. Cabe mencionar aquí el microscopio multifotón, que, valorado en 515.000 euros, permitirá conocer en tiempo real, con alta precisión, la actividad neuronal que se registra en determinados fenómenos, como el aprendizaje de los roedores.

Ello es posible, según explicó un investigador en la visita que se realizó a estas dependencias, gracias a un nuevo tipo de láser, que al estar dividido en dos fotones, no produce ningún daño en el tejido neuronal del animal y permite obtener mayor información ya que el roedor se encuentra vivo y en movimiento, pues hasta ahora debía estar sedado o muerto. Se trata del primer equipo de estas características que se pone en marcha en España.

La fachada principal del nuevo centro de investigación de la Hispalense. La fachada principal del nuevo centro de investigación de la Hispalense.

La fachada principal del nuevo centro de investigación de la Hispalense. / Juan Carlos Vázquez

Dicho microscopio se encuentra en la planta subterránea. Arriba, las dependencias se distribuyen en diversas áreas, según el tipo de función a desempeñar. El recorrido por estas instalaciones supone un auténtico viaje al futuro. Llaman la atención los numerosos controles que han de pasarse en cuanto a seguridad e higiene. Existen varias duchas de aire para esterilizar la ropa de quienes trabajen en el edificio. En ese sentido, llama la atención la sala de limpieza del material que se emplea, que cuenta con un robot lavabiberones automático (con un coste de 360.000 euros), de los que existen escasos ejemplares en España. También aquí se utiliza un sistema de desinfección por ultravioleta para todo el material que se reciba en la sala. De igual modo, se dispone de una inmensa aspiradora con vacío de viruta.

Otras dependencias a destacar son el quirófano experimental (valorado en 100.000 euros), con sistema de secado, filtrado de aire medicinal así como equipo y monotorización anestéstica. Esta sala se completa con un aula para microcirugía y con zonas para la estabulación de mamíferos, anfibios, reptiles y peces.

Posee un microscopio multifotón, único en España, valorado en 515.000 euros

Se trata del edificio más complejo con el que cuenta actualmente la Hispalense, con un control centralizado y automatizado de todas las instalaciones. Su ubicación, cerca del Hospital Virgen del Rocío y de las facultades de Biología y Farmacia, permitirá una mayor relación entre los distintos equipos que investiguen en el ámbito de la Biomedicina.

Como recordó este martes en su intervención Ramírez de Arellano, este edificio -el tercero del Centro de Investigación, Tecnología e Investigación de la Universidad de Sevilla (Citius)- supone la apuesta decisiva por la investigación en el ámbito universitario que comenzó en el año 2000 y que tuvo sus primeros frutos en 2004, cuando se inauguró el primer centro Citius, en el Campus de Reina Mercedes.

Por su parte, el rector de la Hispalense defendió la labor que desarrollan actualmente las universidades: "Hay motivos para creer en nosotros. Si el futuro tiene alguna esperanza, es a través del conocimiento y el desarrollo razonable, sesudo y riguroso que se hace en el espacio universitario". Castro incidió en que "con esta inauguración tenemos la felicidad de dar un paso fundamental para que nuestra comunidad sea parte activa a la hora de responder a los problemas del futuro".

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