Toros

Talavante corta la única oreja de una tarde para la decepción morantista

  • Borja Jiménez malogra un triunfo al fallar en la suerte suprema con el toro de más juego de un encierro desigual de Santiago Domecq

corrida de toros de abono de verano en el puerto Toros: De Santiago Domecq, Bohórquez de correcta presentación aunque desiguales, como su pelea: muy bueno el segundo que terminó rajándose, y de buen juego el sexto, el quinto tuvo interés pero peligro. El tercero se inutilizó tras una voltereta y primero y cuarto, inciertos y desrazados. TOREROS: Morante de la Puebla, de habano y oro, casi entera y descabello (palmas y pitos) y pinchazo y dos descabellos (pitos). Alejandro Talavante, de marino y oro, dos pinchazos y estocada (ovación y saludos) y estocada (oreja). Borja Jiménez, montera en mano por presentarse como matador, de blanco y oro, estocada ladeada (ovación y saludos) y tres pinchazos, otro hondo y seis descabellos (ovación y saludos). INCIDENCIAS: Tres cuartos y calor con mucho levante que molestó mucho en la lidia. Saludó tras parear Trujillo en el segundo, a quien le hizo un quite providencial José Muñoz Perico, quien a su vez se desmonteró con Sobrino en el tercio de banderillas del sexto, bien lidiado por Montoliú. Retransmitió en directo Movistar Plus.

Sí que es raro que en El Puerto se vayan los tres toreros andando hacia el coche de cuadrillas pero ayer fue así. Pudo salir a hombros el más modesto de la terna, Borja Jiménez, pero el estoque le cerró entrar en la nómina del triunfo, que tuvo un único nombre: Alejandro Talavante.

Y un estoque que se nos antoja de mal manejo. Decía Rafael Ortega que había que matar con el hombro y veíamos cómo Jiménez tiraba la estocada golpeando. Lo cierto fue que se le fueron las orejas porque estuvo muy bien con el toro de más juego de la corrida, el sexto, al que le plantó cara con muchísima decisión.

Hay no pocos entendidos en El Puerto que, por activa y por pasiva, cuestionaban la presencia de Borja Jiménez en el abono pero aunque no le ha justificado el triunfo, no nos cabe duda de que vino a dar la cara. A su primero lo esperó en la puerta de chiqueros y fue una pena que el toro se inutilizara de una voltereta en los primeros compases porque el espada lo intentó con mimo y hasta le cuajó una serie con la derecha.

Con el sexto, muy bien, con mucha decisión. Media faena con el toro más pujante y una segunda mitad, con el toro menos humillado y entregado, que resolvió metiéndose en el embroque y citando muy de frente. Valor que volvió a poner en el remate de rodillas. Una faena completa que tuvo sus bellos pasajes con la mano derecha en redondo y muy buen estilo al natural. Pero todo se vino abajo con el estoque.

Sin embargo, Talavante tocó pelo. Con mucho sitio, mucha plaza y tanta firmeza como displicencia en la cara del toro. Toreando muy despacio. Lo que se dice muy toreramente, en ambos astados de su lote. En el primero, un toro que lo hizo todo muy bien hasta que se rajó, fue sensacional con el capote en los lances de recibo y en los quites: verónicas mecidas y templadas antes del puyazo y chicuelinas arrebujadas para quitar al toro. Luego la pincelada de los naturales y los alegres cambios de remate. Y aquí ponemos otro pero: el toro se rajó. Ya aquello no tuvo importancia y no le quedó más a Talavante que buscar al toro en tablas a ver si aquello recuperaba el tono.

Con su segundo, toro con más guasa y que le desbordó en dos ocasiones, resolvió recetando series cortas. Gran momento cuando a una colada respondió con una serie por la derecha mandona, que el toro se tragó protestando, pero se la tragó. La rotunda estocada dio paso a la justa oreja.

Y Morante... No pudo ser. Todos los días no es fiesta. Su primero dividió las opiniones, un toro sin entrega ni recorrido como de a verlas venir. Morante lo sobó, violo, fuese y nada hubo.

Peor su segundo y cuarto de la tarde que además de no romper, también sin recorrido, tuvo formas más bruscas. Como diría otro Rafael, Gallo éste, lote a contraestilo. Y decepción morantista, unos lo acataron y otros no.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios