Ana Turpin se ha especializado en series de época, género donde asegura sentirse "muy cómoda", hasta el punto de desear desarrollar su carrera ataviada con trajes y peinados de décadas pasadas. La actriz gallega, que considera que a un actor "no le encasillan, se encasilla", lleva tres años involucrada en las producciones de época de TVE. Tras participar en La Señora, Turpin regresó anoche en un especial a Amar en tiempos revueltos y retornará a la cuarta temporada de la ficción de sobremesa.

-Aunque haya sido de forma temporal, ha vuelto a 'Amar en tiempos revueltos', ¿cómo ha sido la experiencia?

-Muy buena, ha sido el retorno de Andrea. Amar en tiempos revueltos ha creado un precedente y la gente le tiene un cariño especial que ha trascendido desde la primera temporada. Cuando me llamaron para participar en este especial me pareció muy lógico porque se trataba de satisfacer una demanda del público que nos ve.

-¿Qué le parece este salto al 'prime time' de la serie?

-Que me gusta lo que estamos contando porque es como una película de cine negro que, quien no ha visto la serie la va a entender y, quien la sigue, va a entender muchas más cosas.

-¿Se reincorpora a la serie?

-Parece ser que sí. Estoy muy contenta porque es el público quien te demanda y recibir ese cariño es muy gratificante para un actor. Los actores trabajan con los sentimientos para conectar con su público y si ellos lo reciben y encima te demandan, es maravilloso.

-¿Con sus últimos trabajos en televisión en los que se ha trasladado al pasado, ¿ha tenido que repasar la Historia de España?

-Claro, pero como llevo tres años entre Amar... y La Señora, la memoria histórica la tengo estupendamente.

-¿Qué será lo siguiente?

-Lo siguiente será Cuéntame (risas). Es lo que me queda para completar la trilogía de época.