La sombra de la gestión del exalcalde José Ropero aún se proyecta sobre la Ayuntamiento de Benamejí. Las arcas del Consistorio de este municipio de la Subbética verán mitigada su presión financiera después de que el equipo de gobierno haya conseguido una merma en los intereses que gravaban el crédito solicitado para apoyar la financiación del campo de béisbol municipal, inaugurado en 2010 siendo alcalde Ropero y que supuso una inversión de 710.000 euros a este proyecto. La infraestructura deportiva contó con un presupuesto global de 1,2 millones.

Tras las gestiones con Caja Rural, entidad acreedora de este préstamo, el Ayuntamiento benamejicense ha conseguido aminorar el interés fijado inicialmente en el 4,19% hasta el 0,88%. Ello, según datos facilitados a el Día por la propia alcaldesa, Carmen Lara (PSOE), "supondrá unos 250.000 euros de ahorro" para el Consistorio en el umbral de 2030, fecha prevista de amortización. La negociación ha estado dirigida personalmente por la regidora y ha sido posible "gracias a que tenemos unos número positivos, un presupuesto sano y estable, remanente positivo y un promedio de pago a proveedores de 17,42 días en el tercer trimestre de 2016, tal y como marca la Ley".

La cantidad que se ahorrará es "a tener en cuenta" para este municipio que ronda los 5.000 habitantes y que, según adelantó Lara, "queremos reinvertir en calidad y servicios para nuestros ciudadanos". El ahorro previsto permitirá destinar fondos para financiar las obras del futuro espacio escénico y cultural en las instalaciones del antiguo colegio Virgen de Gracia, "nuestro proyecto estrella", como así lo definió la responsable local. "Estamos empecinados en rebajar la presión fiscal y que las arcas estén saneadas", destacó. Y defendió que el único objetivo que su gabinete se impuso desde que llegó a la Alcaldía es el de "ahorrar para dedicar recursos al bienestar de los ciudadanos".

Hace ahora tres años, en enero de 2014, Ropero anunció oficialmente su dimisión tras 22 años como regidor en un pleno extraordinario en el que estuvo respaldado por decenas de vecinos y por numerosos alcaldes y cargos orgánicos del PSOE cordobés. Ropero salió de la Alcaldía investigado por el cobro de dietas supuestamente ilegales durante varios años, un procedimiento que le provocó una enorme pérdida de crédito político entre los ciudadanos de la localidad. El proceso, en el que también está siendo investigado el exconcejal de Urbanismo, Francisco Hoyos, aún se encuentra en fase de instrucción.