El propietario de la gasolinera Aservi de La Carlota, Miguel Lázaro López, reconoció ayer que fue "injusto" despedir a sus empleadas por no querer llevar falda, les pide disculpas y está dispuesto a volver a contratarlas. López remitió ayer un comunicado, en el que además muestra su arrepentimiento "por los hechos acontecidos", que lamenta "profundamente".

Tras el despido de las seis trabajadoras por no querer usar falda, la dirección reconoce su error, un "injusto despido" y se compromete a "emplear de forma escrupulosa y exclusiva el uniforme oficial y obligatorio de AVIA, la compañía que abandera nuestra estación de servicio, tanto en la zona de pista como en la tienda y cafetería". La red de surtidores nacional AVIA, que cede su imagen a la gasolinera, marca "taxativamente" el uso de un polo rojo, pantalones y botas.

Por su parte, fuentes de la compañía han informado de que han mantenido una reunión con el responsable de la gasolinera y le ha instado a "la inmediata readmisión de las trabajadoras injustamente despedidas". Las mismas fuentes indicaron que rechazan "de forma inequívoca cualquier actitud o comportamiento que atente contra la libertad y dignidad de cualquier empleado de las estaciones de servicio que abanderamos". Al margen de la polémica, una trabajadora de la gasolinera ya indicó que va "a gusto" con la indumentaria por el calor y porque además lleva mallas debajo.