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"La empresa que no apueste por la marca blanca va a pasar grandes dificultades"

  • Los responsables de Covap están convencidos de que el papel de interproveedor lácteo de Mercadona bajo la marca Hacendado ha sido clave para el desarrollo de la ganadería de leche en Los Pedroches

-¿Ha frenado la crisis económica las expectativas de Covap en lo que respecta a la diversificación y la expansión?

-Díaz Yubero (D. Y.): A la vista de los acontecimientos económicos que se estaban produciendo y con la caída del consumo, hicimos un presupuesto para 2009 acorde a lo que iba a suceder, con lo cual no han cambiado las perspectivas que teníamos. El precio de leche, que era muy elevado tanto a nivel de productor como de venta al consumidor, cayó en picado. El ganadero dejó de percibir los precios que obtenía desde finales de 2007 y el coste para el consumidor tuvo que adaptarse al nuevo coste de la materia prima más importante, que es la leche que compramos a nuestros ganaderos. En alimentación animal ocurrió lo mismo. Todo ello lo habíamos previsto.

-¿Como se traduce en cifras?.

-D. Y.: El año pasado nuestra facturación fue de 307, 4 millones de euros, lo que supuso un incremento del 15,15% respecto a 2007, y en cambio para 2009 prevemos una facturación de unos 296 millones, con una reducción lógica por lo que anteriormente he dicho. Para esas cifras es muy importante el volumen de leche al que le damos salida gracias al acuerdo con Mercadona. En lo que llevamos de año, el incremento de ventas en marca Hacendado ha superado el 28% frente a las cifras del año pasado y el resto de actividades de la cooperativa se están comportando con normalidad respecto al presupuesto.

-¿Tan importante ha sido para Covap la salida al mercado con marca blanca?

-D. Y.: A nosotros la marca blanca nos hace mucho bien, porque ha permitido el desarrollo del sector lácteo en Los Pedroches, que es la base de la economía de la zona y representa el 52% de la facturación de la cooperativa. Eso se traduce, por ejemplo, en que en 2008 recogimos 14 millones de litros más de leche que en 2007. Covap ha sido la única industria láctea española que ha sufrido ese incremento y todo gracias a la marca de distribución. Seguimos teniendo la solidez de nuestra marca, pero el crecimiento económico lo estamos teniendo gracias a Mercadona.

-¿Consideran que todo lo que está ocurriendo en el sector marcará en estos tiempos un punto de inflexión en Covap?

-Delgado Vizcaíno (D. V.): No creo que obligue a cambiar nuestra política económica e institucional. Lo que ocurre en el mercado nos está apretando mucho y si en vez de ser una cuestión coyuntural se convierte en estructural pues tendremos que ir cambiando. Es cierto que tenemos actividades que no van tan bien como otras, pero la gestión se están haciendo igual de bien en todas. En el ibérico, por ejemplo, son ciclos. Lo que pasa es que este ciclo ha venido a su momento más bajo en época de crisis y nos está haciendo mucho más daño. Y esto no nos va a hacer cambiar la estrategia que hemos tomado a no ser que se convierta en un problema estructural. Igualmente, en el vacuno de carne o en el ovino.

-Y además, el ganadero sigue quejándose en España del precio que percibe por la leche

-D. Y.: Es cierto que ha habido una caída espectacular de los precios en Europa, por ello fueron unos 5.000 ganaderos a protestar a Luxemburgo. En España, la situación del sector es muy grave en territorios como Asturias, Galicia o Cantabria, pero afortunadamente en el territorio donde actúa Covap la situación de los ganaderos de leche es buena. Estamos ofreciendo unos precios que estarán sobre la media nacional o unos seis o siete céntimos de euro por encima y hemos conseguido con la mayor eficiencia llevar al consumidor unos precios acordes con la situación económica que se está viviendo. Hemos logrado que el ganadero de nuestra zona esté contento. Es más, hay decenas y decenas de ganaderos que quieren incorporarse a la cooperativa y no sólo son de nuestro territorio, porque la situación es desesperada, de baja rentabilidad y de pérdidas importantes en las explotaciones y en nuestro territorio ocurre todo lo contrario.

-Habla del bien que le está haciendo a Covap y a la comarca la marca blanca. ¿Se plantean ampliar esa colaboración con Mercadona a otros productos?

-D. Y.: De momento, somos también interproveedores de mantequilla. Desde hace tres años, toda la mantequilla que se comercializa en Mercadona está producida en Pozoblanco, lo que también es importante a la hora de poder pagar a los ganaderos un diferencial en un momento en el que el precio de la grasa está muy bajo. No hay que olvidar que Mercadona ocupa prácticamente el 38% del mercado y es líder con la marca Hacendado. En cuanto a otras vías de negocio, tenemos un acuerdo con otro grupo que a su vez es interproveedor de Mercadona de corderos y eso le da estabilidad a nuestros precios de ovino en un mercado con muchos altibajos y estamos analizando la posibilidad de que en otros campos de la industria agroalimentaria pudiéramos llegar a algún otro tipo de acuerdo. Hoy lo más importante que hay para la industria agroalimentaria es tener mercado y Mercadona lo que te da es mercado. La prueba está en otras empresas que son nuestras grandes competidoras y que están teniendo serias dificultades, como Pascual, porque lo que le falta es mercado.

-¿La marca blanca ha venido a salvar la situación del sector en perjuicio de la marca propia?

-D. Y.: Hay una realidad. España es el segundo país de Europa en cuanto a presencia de marca de distribución. El paro se ha disparado en nuestro país y frente a esos millones de hogares que han disminuido su renta y que tienen necesidad de comprar a precios más bajos hay varias políticas: marcas de fabricantes que quieren seguir manteniéndose en niveles que no son luego reconocidos por el consumidor, marcas de fabricantes que hacemos el esfuerzo de estar en una línea acorde con lo que hoy el consumidor necesita y unas marcas de distribución que están haciendo también el gran esfuerzo de proporcionar calidad a precios razonable. Hubo una época en la que la marca de distribución parecía algo ajeno a la calidad o a la imagen y hoy está tomando posiciones muy serias. En Andalucía, el 64% de las leches se venden con marca de distribución. Nosotros defendemos nuestra marca porque consideramos que es un valor muy tangible y pedido por muchos consumidores, pero también tenemos que estar en el mundo de la marca de distribución porque nos va a permitir compaginar ambas situaciones. Este es el futuro del sector agroalimentario y quien no lo vea así va a pasar dificultades importantes.

-¿Cómo lleva Covap lo de la atomización del sector ganadero?. Desde la Administración llaman constantemente a crear grandes explotaciones

-D. Y.: Los Pedroches somos la zona de España donde las explotaciones tienen una mayor dimensión, con una media de 700.000 kilos de cuota por explotación y además hay bastantes por encima de esta cifra. El futuro del sector lácteo, para que sea rentable a nivel de producción, pasa por llegar a los 1,5 o dos millones de kilos. La idiosincrasia que tenemos en España nos puede llevar a que eso lo veamos como un imposible, pero lo que ha hecho esta comarca, que no era nada en leche y hoy es una de las más importantes del sector, indica que sí es posible.

-D. V.: Los jóvenes se están incorporando al sector, lo que le ha dado dinamismo y garantía de futuro y a ello ha contribuido nuestro servicio de sustituciones ganaderas.

-¿Eso quiere decir que está asegurado el tan necesario relevo generacional en la comarca?

-D. Y: Algunas cooperativas trabajan con la política de ser suministradoras de leche a granel, como pasa en Galicia. No es lo mismo un ganadero que está dentro de un grupo como el nuestro, que da valor añadido y que fija población gracias a unos pagos diferenciales y favorables, y otros grupos que tienen una situación de estar a lo que pase en el mercado y que no tienen ninguna defensa. Si la leche a nivel europeo sube, pues dan una subida brutal, que baja, pues dan una bajada brutal, y nosotros en cambio damos unos precios razonables, pero sin esos picos que pueden ser de finalización de actividad de numerosas explotaciones. Sólo hay que venir a una de las reuniones de nuestros ganaderos de leche para ver que están absolutamente rejuvenecidos cuando en otras zonas la edad media es de unos 60 años. Hoy por hoy el futuro de la producción láctea en Los Pedroches está asegurada.

-D. V.: Eso ocurre, por ejemplo, en Dos Torres, donde acudí a una reunión de ganaderos y me vine muy feliz al comprobar que había una treintena de jóvenes con 20 y pocos años absolutamente enamorados de su profesión a pesar de lo sacrificada que es. En el resto de pueblos puede que la edad media no sea tan baja, pero puede estar entre 30 y 40 años. Han mejorado bastante sus explotaciones con grandes inversiones, tienen una cuota importante y seguramente tendrán que dar algún paso más para ajustar o aminorar costes con integraciones de explotaciones. Pero lo que está claro es que si a eso sumamos el servicio de sustituciones está asegurado el relevo generacional. Ahora nuestra mayor preocupación es todo lo referido a la sostenibilidad de las explotaciones ganaderas, que se incorpora a la Política Agraria Común, o lo que es lo mismo explotaciones que no sean agresivas con el medio ambiente. Eso supone de nuevo un esfuerzo inversor muy muy importante.

-¿Prevé que se le queden pequeña a Covap las instalaciones con el paso del tiempo?.

-D. Y.: No. En alimentación animal, en piensos, tenemos instalaciones suficientes como para cubrir demandas de futuro. El matadero también tiene capacidad suficiente y en el área de cárnicos posiblemente hagamos inversiones pequeñas para producir hamburguesas y otros productos de menor coste al adecuarnos a las preferencias del consumidor. Las instalaciones de ibérico van a ser suficientes y en lo único donde vamos a hacer inversiones, por esa locomotora que es Mercadona, es en lácteos. Está prevista una inversión de aproximadamente 1,3 millones de euros para una nueva mantequera, ya que estamos en una demanda creciente del 30% en mantequilla dentro de Mercadona, lo que hace que la instalación actual se nos haya quedado pequeña. Y puede haber inversiones aún por cuantificar de la estructura de producción de leche. Lo que si tenemos ya analizado, y lo acometeremos el próximo año, es una sustitución de máquinas. Tenemos envasadoras que aunque sólo tienen cinco años empiezan a quedarse obsoletas.

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