Los ayuntamientos de la provincia de Córdoba, en su conjunto, han logrado reducir en un año su deuda financiera o, incluso, han conseguido mantenerla a cero. Se trata de una tendencia generalizada en los últimos ejercicios y forzada por las directrices del Gobierno central para reducir el déficit público, que no sólo obligan a cuadrar las cuentas cada año para que éstas se cierren con superávit, sino a que éste se destine a amortizar esa deuda, salvo contadas excepciones. Así, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Hacienda y Función Pública, la suma de esa deuda en Córdoba superó a 31 de diciembre de 2016, los 344,4 millones de euros -incluida la registrada por el Ayuntamiento de la capital-, lo que implica que amortizaron a lo largo del año anterior más de un 10,6% en su conjunto. Prueba de ello es que esta cuantía a término de 2015, según los mismos datos, era de 385,66 millones de euros.

Los datos ponen de manifiesto que la gran parte de los ayuntamientos de la provincia han conseguido reducir su deuda viva con los bancos en este periodo. Por localidades, excluida la capital, es la de Lucena la que mayor deuda mantiene con los bancos, en este caso, se eleva a más de 17 millones de euros hasta el 31 de diciembre de 2016. No obstante, el Ayuntamiento lucentino ha logrado rebajar su deuda financiera en un 13,48% en estas fechas. Y como ya avanzó el Día, la intención del actual equipo de gobierno es cerrar el ejercicio de 2017 con un déficit de 13,9 millones de euros.

Ha sido el Ayuntamiento de Cabra el que, según las cifras del departamento que dirige Cristóbal Montoro correspondientes a los citados ejercicios, ha conseguido reducir la cuantía en mayor porcentaje -un 40,1%-, al pasar de una deuda con las entidades financieras de 372.700 euros en 2015 a los 223.500 contabilizados el pasado ejercicio. Tras el de Cabra se encuentra el Consistorio de Baena, cuyo déficit con los bancos ha caído un 21,7%, al pasar de una deuda de 1,1 millones al cierre de 2015 a los 869.100 euros de 2016. El tercer equipo de gobierno municipal que ha conseguido rebajar su deuda viva en el mismo periodo es el de Priego de Córdoba; en concreto, un 19,3%, ya que hace ahora dos años esa cifra superaba los 1,2 millones de euros, frente a los 971.600 de diciembre de 2016.

Y mientras estos consistorios mantienen sus deudas con los bancos, aunque han conseguido reducirlas en un año, hay que más de una quincena que han logrado anular todo su déficit bancario a fecha de diciembre de 2016. El Viso, La Victoria, Valenzuela, Torrecampo, Posadas, Moriles, Monturque, Montemayor, La Granjuela, Fuente Tójar, Fuente la Lancha, Fernán Núñez, Conquista, Cardeña, Aguilar de la Frontera y Valsequillo son los consistorios cordobeses que carecen de deuda alguna con los bancos, según los mismos datos.

En el lado contrario se encuentra el Ayuntamiento de Puente Genil, que en lugar de reducir la deuda viva, ésta ha aumentado un 11,2% en el mismo periodo, Y es que mientras que en 2015 adeudaba a los bancos 847.200 euros, la cuantía al cierre de 2016 se elevó hasta los 942.220 euros.