"El Ayuntamiento de Baena ha paralizado casi un centenar de viviendas, ha ordenado el precinto de obras, ha puesto decenas de multas urbanísticas y ha enviado al juzgado 19 atestados por hechos que podrían constituir delitos contra la Ordenación del Territorio en los últimos años". De esta forma han contradicho fuentes municipales las declaraciones del promotor y ex alcalde Carlos Arenas, quien explicó que su denuncia contra la Ordenación del territorio, presentada en el Juzgado de Baena, se produjo a raíz de recibir un trato desigual por parte del Ayuntamiento, "al haber sido el único propietario denunciado por la construcción de chalet ilegales en suelo rústico", sentencia.

En su caso concreto, según las mismas fuentes municipales, que insisten en que no ha habido trato discriminatorio, se dictaron seis o siete decretos de suspensión, se precintaron al menos en tres ocasiones las obras y fue incumplida en multitud de veces esta orden. Desde el Ayuntamiento se insiste en que eso dio lugar a que en octubre de 2006 se diera traslado de un atestado por desobediencia grave, tras impedir él y su esposa la entrada de los agentes en la finca y llegando a manifestar, según consta en la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 1 de Córdoba, de junio de este año, que "si querían entrar tendrían que hacerlo con pistola en mano y llevándoselo detenido". Por estos hechos, Arenas fue condenado a seis meses de prisión por una falta de desobediencia.